Sebastián Chico, nuevo obispo de Jaén
El hasta ahora obispo auxiliar de Cartagena sustituye a Amadeo Rodríguez, que presentó la renuncia al Papa en marzo por motivos de edad
El Papa Francisco ha nombrado este lunes a Sebastián Chico Martínez como nuevo obispo de Jaén. El hasta ahora auxiliar de Cartagena sustituye a Amadeo Rodríguez Magro, que había presentado su renuncia por motivos de edad el pasado mes de marzo.
«Voy a vosotros con la intención de compartir vuestra vida, caminando juntos como discípulos y seguidores de Jesús. Soy, al mismo tiempo, hermano vuestro por el bautismo y obispo por el encargo apostólico. Quiero ser un pastor según el corazón de Cristo, un hombre de esperanza», ha afirmado en su primer saludo a su nueva diócesis.
Chico ha animado a la Iglesia local que ahora lo recibe a caminar «en sinodalidad, viviendo la comunión, la participación y la misión». «Es un momento de gracia y estoy convencido de que Dios me ayudará a conoceros mejor, a atisbar lo que Él nos está pidiendo», ha añadido.
Además, ha tenido un recuerdo especial para los que, por diversas circunstancias, viven la enfermedad, el sufrimiento, la soledad, la pobreza o la migración. «Estáis en el centro de mi corazón», ha afirmado.
Siempre en Cartagena
Natural de Ceheguín (Murcia) ha desarrollado siempre su tarea pastoral en la diócesis de Cartagena. Primero como sacerdote y luego como obispo. Entre otros cargos, ha sido rector de los seminarios mayor y menor, canónigo de la catedral y miembro del Colegio de Consultores.
Además, ha estado muy cerca de los jóvenes como animador, catequista, coordinador de Pastoral Juvenil, en la pastoral universitaria de una universidad pública y en el seminario. «La juventud lleva a una viveza de esperanza, de esa que yo quiero vivir y transmitir a los jóvenes. Quiero seguir estando muy cerca de ellos», afirmó en una entrevista en Alfa y Omega antes de ser ordenado obispo en 2019.
En la actualidad, Chico es miembro de la Comisión Episcopal para el Clero y Seminarios desde 2020. Fue miembro de la Comisión Episcopal de Seminarios y Universidades desde noviembre de 2019.