Pacto de Convivencia exige el «cese total e inmediato de la violencia»

La plataforma Pacto de Convivencia ha denunciado la «intensificación de la barbarie de los conflictos violentos en el ámbito internacional» y el «creciente aumento de ataques a la población civil y a organizaciones de ayuda humanitaria nacionales e internacionales». Ante este escenario, la plataforma ha hecho un llamamiento «al cese total e inmediato de la violencia» e insiste en «el inexcusable deber de toda la familia humana al más escrupuloso respeto del derecho internacional».

Así se ha expresado en una declaración emitida en torno al Día Mundial de la Justicia Internacional, que se celebró el jueves, y firmada por todas las entidades que forman Pacto de Convivencia: Arzobispado de Madrid; Colegio Oficial de la Psicología de Madrid; Comisión Islámica de España; Consejo de Víctimas de Delitos de Odio y Discriminación; Coordinadora de Organizaciones de Cooperación para el Desarrollo; Crue Universidades Españolas; Diaconía España; Movimiento contra la Intolerancia.

En el documento, las entidades explican que este respeto al derecho internacional se hace «aún más urgente en relación con respeto al derecho internacional humanitaria», el cual permite «asistir a todas las víctimas de los conflictos de la forma más eficaz, rápida e integral».

En este sentido, «condenamos todos lo ataques deliberados contra organizaciones humanitarias, servicios médicos y asistenciales» en cualquier lugar del planeta, y «los intentos dolosos crecientes de criminalización de personas y entidades que trabajan en la atención y defensa de las víctimas de los conflictos».

El escenario, según Pacto de Convivencia, hace necesario recordar la Declaración de Derechos Humanos, que habla del «deber de comportarse fraternalmente» y que esto «es norma común que obliga a todas las personas, todas las instituciones y todos los países».

Por último, las distintas organizaciones firmantes se posicionan en contra de cualquier escalada bélica como propuesta de solución a los conflictos y alaban el trabajo de las entidades humanitarias, que «son la vanguardia del necesario esfuerzo común para elevar en todos los ámbitos y escenarios el nivel de la dignidad humana en todos los escenarios en que se deteriore». Así «rechazamos cualquier actuación que denigre tal dignidad, sea por acción, omisión o legislación».