Osoro a los jueces: «Hacer justicia es un trabajo arduo»
El arzobispo de Madrid preside la Misa con la que se abre el Año Judicial en España
El pasado lunes la iglesia de Santa Bárbara, situada muy cerca del Tribunal Supremo y la Audiencia Nacional, acogió la tradicional Misa de inicio del año judicial. En ella, el arzobispo de Madrid subrayó que la justicia «es el compromiso incansable de reconocer, garantizar y reconstruir esa dignidad que tantas veces olvidamos o ignoramos de todos los hombres» para que, de esa forma, «puedan sentirse los principales protagonistas del destino de este mundo».
Ante la atenta mirada de algunos magistrados del Supremo, vocales del Consejo General del Poder Judicial y magistrados de la Audiencia Nacional y del TSJ, el cardenal Osoro incidió en que la búsqueda de la justicia «es una misión que compromete y que os pide un trabajo arduo, constante y sin tregua» porque, como decía el Papa Francisco en la última Jornada Mundial de la Paz, es «una flor frágil que trata de florecer entre las piedras siempre».
En este sentido, tildó de «fundamental» el trabajo que desempeñan los jueces para que «cada nueva generación se siente involucrada por un camino que tiene que ser el que propicie siempre la cultura del encuentro», que conlleva «reconocer al otro, estrechar lazos y tender puentes».
«Queridos hermanos, que vuestros trabajos durante este curso que iniciáis sean precisamente para restablecer esa justicia y esa paz. Que el Señor os bendiga y os dé su sabiduría», les deseó el purpurado al final de la celebración, en la que estuvo acompañado por el párroco, Agapito Domínguez.