Ortega ordena el cierre de seis emisoras católicas de Nicaragua
Además, la policía irrumpió en una parroquia para confiscar los equipos de la Radio Católica de Sébaco
Daniel Ortega sigue consumando su política de silenciar a la Iglesia y a cualquier voz crítica en Nicaragua.
A través del Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (TELCOR), Daniel Ortega ha ordenado el cierre de seis emisoras católicas. La diócesis de Matagalpa lo ha hecho público a través de un comunicado en el que indican que las emisoras afectadas son Radio Hermanos, Radio Nuestra Señora de Lourdes, Radio Nuestra Señora de Fátima, Radio Alliens, Radio Monte Carmelo, y Radio San José, que operan en municipios del norte de Nicaragua.
La diócesis señala que TELCOR argumenta que desde el año 2003, Radio Hermanos opera sin el título que la habilita para hacerlo. Como demostración de que se intentó regularizar la situación, la diócesis también presenta el documento con el que se solicitó la habilitación en el año 2016 y el recibí de parte de las autoridades de TELCOR que, por su parte, nunca actuaron.
El obispo de la diócesis de Matagalpa es Rolando Álvarez a quien el régimen de Ortega tiene en el punto de mira por sus críticas. Para el prelado, el gobierno quiere «una Iglesia muda». Por eso, el comunicado de la diócesis reitera que, pese a las trabajas, continuarán «informando y denunciando cualquier situación que como esta siga violentando la libertad de expresión y religiosa de Nicaragua».
La clausura de estos medios se suma a la suspensión en junio pasado del canal de televisión de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN).
Para cumplir con su dictado, la policía ha irrumpido en la capilla del Niño Jesús de Praga de Sébaco para confiscar los equipos de la Radio Católica. Tal y como recoge el diario La Prensa, el Canal Católico de Sébaco informa de que la policía realizó disparos al aire y lanzó gases lacrimógenos contra algunas personas que intentaron defender las instalaciones de la emisora católica.
Los medios de la Iglesia no son los únicos que han sufrido la mordaza del tándem Ortega-Murillo. Hace unos días, periodistas, reporteros gráficos y personal del mencionado diario La Prensa tuvieron que abandonar a toda prisa el país después de que dos de sus compañeros fueran arrestados por la policía y encarcelados. Este diario, por ejemplo, sigue operando pese a que el régimen mantiene secuestradas sus instalaciones desde agosto de 2021.