Ni la discapacidad ni la incomprensión son obstáculo para seguir la Misa con este libro - Alfa y Omega

Ni la discapacidad ni la incomprensión son obstáculo para seguir la Misa con este libro

La Santa Misa en pictogramas permite vivir con intensidad la Eucaristía a personas con discapacidad. «Es importante que se vea como algo normal»

Rodrigo Moreno Quicios
Martha Elizabeth Chuquipiondo muestra a su hijo uno de los pictogramas que ha elaborado. Foto cedida por Martha Elizabeth Chuquipiondo

Martha Elizabeth Chuquipiondo es madre de un chico con autismo y autora de La Santa Misa en pictogramas, un libro eminentemente visual que la editorial PPC presenta este miércoles en el Arzobispado de Madrid. Según cuenta a este semanario, preparó los materiales consciente de que hay padres con «muchísima dificultad para ir asiduamente a Misa» por las quejas de quienes consideran ruidosos a sus hijos.

Ella matiza que «nunca ningún sacerdote me ha hecho un mal gesto ni me ha mirado mal». Pero sí que narra un episodio puntual en el que «fui a una parroquia hace un par de años en un día en el que mi hijo estaba nervioso y alguien me dijo al final de la Misa que, por favor, no volviera a traerlo». Igualmente, al habla con otros padres de alumnos de colegios especiales «me han comentado algunas situaciones muy desagradables».

La autora con todos los materiales desplegados.
La autora con todos los materiales desplegados. Foto cedida por Martha Elizabeth Chuquipiondo.

Sin embargo, en la parroquia San Ramón Nonato de Vallecas «encontré un sacerdote que no suele poner resistencias con estos temas». Allí halló el impulso para llevar a cabo la obra.

Para pequeños y mayores

El libro «está dividido en siete secciones con encabezados que explican las partes de la Misa», detalla su autora. Además, en su interior «tenemos fichas más pequeñas» que ayudan a desgranar esas siete partes en cuestión. Por ejemplo, «en la Eucaristía, en el momento de consagrar el pan, los pictogramas explican cómo el pan se convierte en Jesús». «Con un lenguaje muy sencillo, ahí se va a entender la transubstanciación», señala la autora.

Chuquipiondo explica que, tal y como están elaboradas estas coloridas fichas, «este material lo pueden utilizar personas sin discapacidad intelectual». Ya sean «los pequeños de iniciación cristiana» o personas adultas que acaban de descubrir la vida de fe y no han recibido un sustrato católico en su familia.

«Acostumbrados a muchos «noes»»

La autora de La Santa Misa en pictogramas confiesa que los padres de chicos con condiciones especiales «estamos acostumbrados a recibir muchos “noes”» pero, «el Arzobispado de Madrid lleva la delantera porque se están haciendo en las vicarías talleres de discapacidad». Y subraya que «lo importante es que las parroquias vean esto como algo normal» así como que «se incluya a las familias y no las dejen de lado».

Los niños utilizan los pictogramas porque también son útiles para los pequeños.
Los niños utilizan los pictogramas porque también son útiles para los pequeños. Foto: Martha Elizabeth Chuquipiondo.

Es algo que se manifestó no solo el pasado 13 de noviembre, cuando el cardenal Cobo confirmó a once chicos con discapacidad. Según recuerda Martha Elizabeth Chuquipiondo, en 2024 otros 13 niños celebraron su Primera Comunión en la Fundación Bobath —centrada en la atención a la parálisis cerebral— y, en el caso de «los niños que no podían recibirla directamente, les ayudaron con un poquito de agua o con una jeringuilla».