Nace el primer centro de escucha dentro de una universidad

Se trata del primer centro de escucha que nace dentro de un campus universitario. Todavía no ha abierto sus puertas, pero lo hará próximamente después de que el pasado 25 de enero el presidente de la Universidad La Salle de Madrid, Maximiliano Nogales, y el director del Centro de Humanización de la Salud de los religiosos camilos de Tres Cantos (Madrid), José Carlos Bermejo, firmaran un convenio de colaboración para su puesta en marcha.

La idea surgió gracias a la Unidad Móvil de Intervención (UMI), que es una especie de centro de escucha portátil con el que cuentan los religiosos camilos. «La UMI se suele desplazar para dar formación o para atender situaciones de crisis. Y esta unidad ha ido varias veces a La Salle para el tema formativo», explica Marisa Magaña, directora del Centro de Escucha San Camilo.

Tras aquella experiencia, a uno de los responsables de la universidad «le pareció útil contar con algo más permanente dentro del campus». Por estadística, «un centro de estudios de estas características puede tener un número elevado de personas que estén pasando por un momento de dificultad, de estrés, o que lo estén pasando mal por la pérdida de un ser querido, así que les pareció buena idea contar con un centro de acompañamiento emocional y orientación psicológica gratuita para los alumnos», subraya Magaña.

También ha influido la pandemia, que según todos los estudios ha provocado un aumento notable de los problemas de salud mental. «Han sido dos años muy intensos», reconoce la directora. De hecho, «en este tiempo han crecido las peticiones de apertura de centros, sobre todo en parroquias, en Cáritas… La Iglesia se está movilizando mucho para abrir estos espacios».

Duelo y counseling

El centro de escucha todavía no ha abierto sus puertas. «De momento, se ha firmado el convenio». Ahora toca «reunir al grupo de voluntarios», que tienen que ser o «bien psicólogos o personas con formación en el ámbito del acompañamiento». Se les instruye en el modelo de intervención de los camilos, «tanto en duelo como en counseling. Y ya por último se monta el espacio físico y se implementa el programa de citas», resume Marisa.

Una vez que se haya completado todo este proceso, el centro de escucha comenzará a funcionar. El horario dependerá del número de voluntarios, y también influye el lugar donde se encuentre situado el centro. «Al ser una universidad se debe tener en cuenta el horario de clases de los alumnos». La atención es con cita previa. «Se solicita una intervención y se apunta la temática de la misma», simplemente «para poder derivar al voluntario experto en ese tipo de problemática concreta».

«Hay un límite de 20 sesiones máximo. Son gratuitas y tienen una hora de duración. Siempre el mismo día, a la misma hora, con la misma persona. Por supuesto, con absoluta confidencialidad», concluye Marisa Magaña, directora del Centro de Escucha San Camilo.