Monseñor Osoro, en San Dámaso y en Comillas

La visita a San Dámaso comenzó con la reunión conjunta de los Claustros de todas las Facultades, en la que el Rector, don Javier Prades, dio la bienvenida a monseñor Osoro, Arzobispo de Madrid y nuevo Gran Canciller de la Universidad. Monseñor Osoro expresó su agradecimiento por la acogida y destacó la importancia de la misión de la Universidad al servicio de la Iglesia, exhortando a realizar la tarea académica ante los desafíos actuales con creatividad e imaginación, desde la armonía de estudio y oración, en la diaconía de la verdad y con espíritu de humanidad y de escucha.

En la posterior celebración de la Eucaristía –que estuvo concelebrada por monseñor Martínez Camino, obispo auxiliar de Madrid, monseñor Reig Pla, obispo de Alcalá de Henares, monseñor Escudero Torres, obispo de Palencia, y por medio centenar de sacerdotes–, el arzobispo de Madrid recordó la figura del Papa san Dámaso e invitó a los presentes «a que nos dejemos amar y conquistar por el Señor. Pongamos nuestra vida en el Evangelio. No solo tenemos que dejarnos amar por el Señor sino dar a conocer el Evangelio». Además, destacó la importancia de que en la Universidad Eclesiástica San Dámaso «se prepare a discípulos del Señor para dar a conocer el Evangelio», y pidió «dar la vida por el Señor con la singularidad con la que el Señor lo hace, estando en los caminos, porque el Señor saca discípulos de todos los pueblos y países. Hay que salir dando la vida a descarriados, heridos y enfermos. Sin distinción, dar la vida por todos los hombres como lo hizo el Señor».

También en Comillas

Asimismo, monseñor Osoro también estuvo presente por la tarde en la Universidad Pontificia Comillas, en Madrid, con motivo de la fiesta de Santo Tomás de Aquino. El Rector, el padre Julio L. Martínez, agradeció la presencia por primera vez en el acto de monseñor Carlos Osoro, quien durante la Eucaristía pidió a la institución universitarias «una búsqueda honesta de la verdad y del bien común», al mismo tiempo que ensalzó «la cultura del encuentro y la necesidad del encuentro social, un espíritu que debe imperar también en la universidad».