Tres Reyes Magos ayudan a las mujeres de los alrededores de Belén a dar a luz
La clínica móvil del Hospital Sagrada Familia, de las Hijas de la Caridad, atiende a las mujeres de los poblados beduinos y los campos de refugiados
2.000 años después, a muchas mujeres de los alrededores de Belén les sigue costando encontrar un lugar seguro para dar a luz. Son las habitantes de algunos campos de refugiados del desierto de Judea y de los poblados beduinos de la zona, como Rashaida. «Es una aldea muy remota lejos del centro». Ir hasta Belén resulta casi imposible por las dificultades en el transporte, relata una de ellas. Como consecuencia de ello, renuncian al seguimiento médico, y ello da lugar a abortos, nacimientos prematuros o partos de alto riesgo que se podrían haber evitado.
No se trata solo del embarazo o de dar a luz. «Después del parto, estaríamos muy cansadas como para ir hasta la ciudad» a asegurarse de que todo va bien, añade otra. Afortunadamente para ellas, ya no tienen que hacerlo. La clínica móvil del hospital Sagrada Familia, de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, «nos pone muy fácil conseguir atención cuando vienen una vez a la semana a Rashaida. El médico hace un seguimiento de nuestra salud y del embarazo». Y, además, como también hay un pediatra en el equipo, «podemos preguntarle por la salud de nuestros hijos».
Vera Bannoura, una enfermera que lleva 25 años trabajando en el hospital, explica que «visitamos a esa pobre gente en su puerta. Como tenemos un calendario fijo, saben cuándo vamos a ir». El servicio comenzó en 1995. Cuatro días a la semana, los tres Reyes Magos del proyecto —Bannoura como enfermera, además de una ginecóloga y un pediatra—, viajan durante cerca de una hora por los lugares más agrestes de la zona. Luego, atienden a las mujeres y a sus hijos durante unas cinco horas, antes de emprender el regreso.
Ejemplo para los niños
«Estamos muy contentas con el esfuerzo que hacen, y porque se preocupan por nuestra aldea», subraya agradecida una de las pacientes. Destaca, sobre todo, la dedicación del equipo a los niños que tienen necesidades especiales. El impacto que tienen en la zona, además, no es únicamente sanitario. Como explica Bannoura, «somos un buen ejemplo para esas familias y para sus hijos pequeños, ya que les anima a estudiar y ser del tipo de personas que ayudan a mejorar el nivel de vida» de los demás.
Para poder seguir adelante con este servicio, llegando a más aldeas, Manos Unidas ha lanzado el reto navideño En Belén muchas mujeres todavía no tienen dónde dar a luz. Con esta campaña se pretenden recaudar 108.628 euros para mantener la clínica móvil. También «se mejorarán las instalaciones del Hospital Sagrada Familia con la adquisición de una incubadora móvil y de un escáner pediátrico para diagnosticar y seguir la evolución de muchos bebés prematuros».