Los obispos tras su visita a Tierra Santa: «A nuestros hermanos se les niegan los derechos básicos»
La Coordinadora de Obispos para la Iglesia en Tierra Santa pide en un mensaje al final de su encuentro anual que se aplique el derecho internacional, que se reconozca el Estado de Palestina, que se atiendan las preocupaciones de seguridad de Israel, que se rechace el apoyo político o económico a los asentamientos, y la oposición decidida a cualquier acto de violencia o abusos de los derechos humanos por cualquier parte
La Coordinadora de Obispos para la Iglesia en Tierra Santa ha emitido un duro mensaje al concluir su visita en el que certifican «el fracaso de la comunidad internacional para ayudar a lograr la justicia y la paz aquí en el lugar del nacimiento de Cristo» y en el que instan a los gobiernos a «hacer más para cumplir con sus responsabilidades de defender el derecho internacional y proteger la dignidad humana. En algunos casos ellos se han convertido en cómplices activos de los males del conflicto y la ocupación».
Los obispos aseguran haber sido «testigos de cómo la construcción de asentamientos y el muro de separación está destruyendo cualquier posibilidad de que dos estados existan en paz» y aumenta «la evaporación de la esperanza de una solución duradera».
Gaza, «una presión al aire libre»
Asimismo, la Coordinadora denuncia que «las condiciones de vida se vuelven cada vez más insoportables». Esto es «dolorosamente claro» en Cisjordania, donde «a nuestras hermanas y hermanos se les niegan incluso los derechos básicos, incluida la libertad de movimiento». O en Gaza. Allí «las decisiones políticas de todas las partes han tenido como resultado la creación de una prisión al aire libre, los abusos contra los derechos humanos y una profunda crisis humanitaria».
En este contexto, los prelados han sido recibidos por varias familias que se encuentran «centradas ahora en la supervivencia diaria y cuyas aspiraciones se han reducido a lo esencial, como la electricidad y el agua potable».
Ante este panorama, el mensaje de la Coordinadora habla de la conmoción de los obispos ante «el sacrificio de hermanas religiosas, laicos y sacerdotes que se están acercando con respeto a cada lado para construir un futuro mejor para todos. Ofrecen servicios vitales, especialmente educación, oportunidades laborales y atención a las personas más vulnerables. Damos gracias por su testimonio».
Contribuir a la solución
Antes de concluir, los prelados invitan a los cristianos de «nuestros propios países a orar y apoyar esta misión». Una forma de hacerlo son las peregrinaciones —que actualmente están creciendo—, a las que invitan a encontrarse con las comunidades locales en sus visitas.
Por último, la Coordinadora de Obispos para la Iglesia en Tierra Santa esboza una hoja de ruta que ayude «a construir una nueva solución política arraigada en la dignidad humana para todos». En ella se incluye la necesidad de aplicar el derecho internacional, que se reconozca el Estado de Palestina; que se atiendan las preocupaciones de seguridad de Israel, que se rechace el apoyo político o económico a los asentamientos; y la oposición decidida a cualquier acto de violencia o abusos de los derechos humanos por cualquier parte.