Los obispos de Corea del Sur expresan su «dolor indescriptible» por las víctimas del accidente aéreo - Alfa y Omega

Los obispos de Corea del Sur expresan su «dolor indescriptible» por las víctimas del accidente aéreo

De los 181 pasajeros a bordo, solo dos miembros de la tripulación han sido rescatados con vida. El presidente de la conferencia episcopal ha pedido centrarse ahora en mejorar la seguridad en vez de en buscar responsables

José Calderero de Aldecoa
Equipos de rescate en el lugar del accidente
Equipos de rescate en el lugar del accidente. Foto: EFE / Yonhap.

Los obispos de Corea del Sur han expresado sus condolencias por los fallecidos en el accidente aéreo que tuvo lugar el 29 de diciembre en el aeropuerto internacional de Muan cuando un avión de pasajeros de la compañía Jeju Air se salió de la pista durante un aterrizaje de emergencia y se estrelló contra la pared exterior del aeródromo. De los 181 pasajeros a bordo, solo dos miembros de la tripulación han sido rescatados con vida.

«El dolor por aquellos que fallecieron repentinamente es indescriptible, y la conmoción y la tristeza experimentadas por sus afligidas familias no podrán ser apaciguadas con ninguna palabra de consuelo». Sin embargo, «espero sinceramente que el Dios misericordioso abrace las almas de las víctimas y consuele el dolor y las heridas de sus familiares», ha manifestado Lee Yong-hoon, presidente de la Conferencia Episcopal Católica de Corea.

El prelado ha aprovechado su mensaje, publicado en la página web del episcopado, para pedir a las autoridades que «hagan todo lo posible desde sus respectivas posiciones para mejorar el entorno y las condiciones de seguridad» y así «evitar que tales tragedias vuelvan a ocurrir». Aunque Lee Yong-hoon reconoce que «es imposible prevenir por completo» el riesgo, exhorta a minimizarlo lo máximo posible.

El presidente de los obispos insta a centrarse en esta labor «en lugar de estar ocupados intentando determinar quién es el responsable». Cabe destacar que el presidente de la compañía aérea Kim E-bae pidió perdón públicamente por el accidente en una rueda de prensa, pero dijo que la aeronave siniestrada se encontraba en perfectas condiciones. La empresa es una de las low cost más grandes de Asia.

«Una vez más, oramos por el eterno descanso de las víctimas que fallecieron en el accidente aéreo» y «ofrecemos palabras de consuelo a las personas que también están desconsoladas por la repentina noticia. Amén», concluye el comunicado.