Los obispos bolivianos critican el intento de golpe de Estado

La Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB) ha criticado el intento de golpe de Estado en el país, encabezado por el general Juan José Zúñiga y que se ha saldado con al menos nueve heridos. «Repudiamos toda acción que va en contra de perturbar la estabilidad democrática de nuestro país», han escrito los prelados en un escueto comunicado.

Zúñiga se personó este miércoles en la plaza de Murillo de La Paz, centro del poder político del país, y la tomó junto a varias unidades del Ejército. Poco después, sin embargo, cejó en su intentona tras confrontar con el propio presidente Luis Arce a las puertas de la sede del Gobierno, quien ordenó al militar que se replegara. La retirada solo se produjo después de que Arce tomara posesión del nuevo mando de las fuerzas armadas y nombrase al nuevo comandante del Ejército, José Sánchez.

«La convivencia pacífica debe ser garantizada por toda institución pública», han instado desde la CEB, al mismo tiempo que han llamado a «que se respete el orden constitucional y se busquen espacios de diálogo para solucionar los conflictos». El comunicado termina con una petición a la Virgen, reina de la paz, para que «interceda por todos, en particular por la situación social que vive nuestro país».

Detención del general

Las autoridades ya han logrado detener tanto al general como al exvicealmirante Juan Arnez Salvador, que está acusado, según la prensa local, de los delitos de terrorismo y de alzamiento armado contra la seguridad y soberanía del Estado.

Tras su detención, el general Zúñiga ha declarado que el presidente le había pedido sacar «los blindados» para «levantar» la popularidad del mandatario boliviano, quien le habría confesado que la «situación está muy jodida».

«El presidente me dijo la situación está muy jodida, muy crítica. Es necesario preparar algo para levantar mi popularidad. ¿Sacamos los blindados?», ha manifestado el militar, que respondió de forma afirmativa a la supuesta pregunta del presidente.