Los Legionarios inician su Capítulo marcado por el descubrimiento de un antiguo caso de abusos

Este lunes 20 de enero se inició en Roma el Capítulo General ordinario 2020 de la Congregación de los Legionarios de Cristo, que debía transcurrir en un clima de normalidad. Es el primer capítulo que se celebra después de que la Santa Sede aprobara la Federación Regnum Christi. Sin embargo, este mismo lunes los Legionarios de Cristo de México han emitido un comunicado en relación al caso de Fernando Martínez Suárez, que el pasado día 13 de enero perdió el estado clerical por cometer abusos sexuales contra menores en el pasado.

«Los Legionarios de Cristo de México nos avergonzamos de los abusos cometidos por Fernando Martínez Suárez, por la negligencia de la Congregación en la gestión de las denuncias del pasado y por la falta de una acogida adecuada a las víctimas. Una vez más pedimos perdón a ellas y a sus familias. Nos duele su sufrimiento y deseamos aliviarlo», ha escrito la delegación mexicana en un comunicado.

El procedimiento contra Martínez Suárez ha terminado afectando a los primeros compases del Capítulo General, en el que ha declinado participar al menos un legionario relacionado con la gestión del caso.

Hacer balance

El Capítulo General, que se está celebrando en Roma, se extenderá hasta el 27 de febrero. Tiene por delante tres tareas principales: hacer balance de los últimos seis años de gobierno, analizar los desafíos y retos de su misión evangelizadora como parte de la Iglesia, y elegir al Gobierno General adecuado que lleve adelante las prioridades para el próximo sexenio.

Sobre la mesa, tal y como han reconocido desde la propia congregación, se encuentran asuntos como «la misión apostólica de la congregación y su relación con las demás vocaciones del Regnum Christi, la formación de los seminaristas, el camino para avanzar en la atención a las víctimas de abusos sexuales, los posibles encubrimientos, negligencias u omisiones en relación con los mismos en el pasado, la vivencia de la pobreza en la congregación, la vida comunitaria, la pastoral vocacional y la disciplina religiosa en general».