Las víctimas de abusos serán las protagonistas del acto de reparación que prepara la Iglesia de Madrid
«Lo importante no es que salvemos la institución, sino que salvemos a las víctimas», ha dicho el cardenal Cobo durante la presentación del último libro de Luis Alfonso Zamorano
Las víctimas de abusos sexuales en la Iglesia serán las protagonistas del acto de reparación que está preparando desde hace tiempo la Iglesia de Madrid, a través de Proyecto Repara. Lo aseguró el cardenal arzobispo de Madrid, José Cobo, durante la presentación el pasado miércoles del libro Te llamarán «mi favorita» (PPC), del religioso palentino Luis Alfonso Zamorano. En esta obra se reflexiona sobre la reparación espiritual de las víctimas de abusos.
El acto «no está cerrado todavía porque son las víctimas, las propias víctimas que hemos acompañado en Madrid, las que lo están montando, las que están delimitando y las que en estos días cerrarán un poquito la fecha», reconoció Cobo. Ha dejado «que sean ellos los que marquen la pauta y tengan el protagonismo».
Sobre el contenido del acto, que espera que se pueda celebrar «pronto», en este último trimestre del año, el purpurado explicó que consistirá «en un acto público, una petición de perdón y una oración». En cualquier caso, «será una cosa yo creo que sencilla y tranquila, de reparación y también de visibilizar». La idea es mostrar el acompañamiento que se ha realizado y también poner delante de la Iglesia y delante de la sociedad la voz de las víctimas, «que yo creo que también merece la pena ser escuchada».
Preguntado por si las víctimas siguen dolidas con la jerarquía y con la Iglesia, Cobo manifestó que «no se puede hacer una categoría general», porque cada persona «tiene que hacer un proceso» y algunos procesos son «mucho más largos». En este sentido, destacó que desde el Proyecto Repara acompañan a las víctimas de forma que ellas siempre «tengan el protagonismo» y «marquen los tiempos».
El abismo
Durante la presentación del libro, el arzobispo de Madrid reconoció que «abusos puede haber en muchos campos» pero precisó que «cuando se cometen en nombre de Dios», se «multiplica la diferencia» porque «en otras formas de abuso no se toma el nombre de Dios en vano». Además, dijo que en estos abusos «se llega a violentar a la víctima hasta límites insospechados». «Ese es el abismo», remarcó.
Además, el cardenal José Cobo defendió que «lo importante no es salvar la institución, sino que salvemos a las víctimas». En todo caso, el arzobispo afirmó que se van «dando pasos lentamente».
En el acto también intervino una víctima de abusos en la Iglesia, Juan Carlos González, que puso de relieve el problema de «ocultación» y el «secreto» que ha sido «el patrón que anida en el fondo de los abusos» en la Iglesia para «evitar el escándalo». Pero advirtió de que también «otro gran victimario» es «el olvido».
Por su parte, el autor del libro, Luis Alfonso Zamorano, dijo que la Iglesia comete un «error» cuando dice que «en la sociedad hay muchos más casos» de abusos. Cuando esto ocurre no se llega a «entender la extrema gravedad de lo que significa el abuso en la Iglesia», explicó.
Según Zamorano, se ha «avanzado mucho» en la reparación pero la Iglesia no está para «autocomplacerse» porque «aún queda mucho dolor». Además, añadió que «sin el beso de la justicia canónica, que sigue con sus procesos muchas veces revictimizando y dejando a víctimas sin justicia, es muy difícil que se repare la herida y se recupere la fe».