Las hermandades madrileñas entregan más de 68.500 euros en material para paliar la crisis del coronavirus
Han aportado su bolsa de caridad y en algunos casos transfiriendo el dinero que se hubieran gastado en las procesiones para comprar material fungible, packs de comida o productos de higiene
Las congregaciones, hermandades y cofradías de Madrid no han podido procesionar por las calles con sus imágenes titulares esta Semana Santa pero han ejercido su otra gran labor y probablemente la más desconocida: la caridad, que se ha situado como prioritaria este año. Ahora, en tiempo de Pascua se recogen los frutos de aquello que se sembró en Cuaresma cuando, a iniciativa del mayordomo de la Congregación del Santísimo Cristo de los Alabarderos, Antonio Calahorro, se inició una campaña de donativos para ayudar durante la pandemia del coronavirus.
Calahorro explica que en esta campaña han participado casi todas las hermandades de la capital y algunas de los pueblos de la Comunidad de Madrid, aportando de su bolsa de caridad o, en algunos casos, transfiriendo el dinero que se hubieran gastado en la procesión: «Algunas han donado toda la flor del paso o la parte de la estación de penitencia». Y también ha habido particulares «muy generosos, con ingresos de 1.000 euros», en una campaña que ha traspasado fronteras ya que llegó incluso una donación desde México.
En total han sido 68.513 euros los recogidos en una cuenta que se mantuvo abierta hasta el 13 de abril y que ha permitido hacer entrega de material en dos fases, siempre coordinados con la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, que fue quien marcó las necesidades. A finales de marzo, fue enviada al hospital de IFEMA una primera ayuda de 31.566,21 euros en forma de material fungible (99.000 vasos de cartón, 99.000 packs de cubertería y 80.0000 tuppers de primer y segundo plato).
Segunda fase en marcha
La segunda fase permanece activa ya que el material, por un valor de 36.946,8 euros, ha sido distribuido este miércoles a cinco instituciones con necesidades urgentes. Así, el Cottolengo del Padre Alegre de Algete ha recibido 20.000 packs de comida de primer y segundo plato, material de cocina desechable como platos, vasos, cubiertos, servilletas o pajitas para beber (80.000 unidades), pero también baberos y sábanas desechables (20.000 y 10.100, respectivamente), empapadores (10.000) y juegos de sábanas de tela para reponer (200). Y a las Hermanitas de los Ancianos Desamparados les han llegado, a sus dos residencias de Madrid capital, packs desechables de cubiertos precintados (24.000), juegos de sábanas de tela (900), empapadores (8.000) y baberos desechables (30.000). «De estos viejitos no se acuerda nadie», sentencia Calahorro.
Los donativos también han facilitado el envío de alimentos no perecederos y productos de higiene y limpieza, suministrados «a través de pedidos a El Corte Inglés», al convento de las Hermanas de la Cruz, que tienen atención a desfavorecidos, y a las Madres Carboneras. En este último caso, el mayordomo de los Alabarderos habló con la madre superiora y «se les ha hecho un encargo de cantidades abultadas de garbanzos, arroz, macarrones, menestra, yogures… y también de productos de higiene».
Para Antonio Calahorro, la experiencia, aunque ha supuesto mucho trabajo, ha sido «bonita; es lo menos que podíamos hacer estando confinados», explica, y por eso «da por bien empleado el tiempo». Aunque esta campaña ya está cerrada porque «yo me comprometí públicamente a que se cerraba el Lunes de Pascua y hay que cumplir la palabra», los donativos se pueden continuar haciendo a través de Cáritas, que «es lo suyo, es la obra de caridad de la Iglesia y las hermandades somos Iglesia».
Cuenta EMERGENCIA COVID-19 de Cáritas Diocesana Madrid: ES67 0075 7007 8506 0715 0747
Bizum Cáritas Diocesana de Madrid – Código: 33645