La sociedad civil como solución - Alfa y Omega

La sociedad civil como solución

Ante la falta de consenso entre las fuerzas políticas para la transformación del país tras la pandemia, líderes y entidades trabajan en propuestas de largo alcance que puedan aglutinar apoyos. Es la idea de Equipo País o Plan A

Fran Otero
Diego Isabel tiene claro que la economía es «un invento de las personas para ayudar a las personas»
Diego Isabel tiene claro que la economía es «un invento de las personas para ayudar a las personas». Fotografía cedida por Diego Isabel La Moneda.

La sociedad civil ha demostrado desde el inicio de la pandemia que su papel es fundamental. Sociedad civil más o menos organizada. Jóvenes que han hecho la compra a sus vecinos mayores, mayores entregados a la confección de mascarillas, makers —con impresoras 3D— fabricando máscaras protectores, centros de Formación Profesional diseñando respiradores de bajo coste, empresas poniendo a disposición de las autoridades sus canales de distribución o confesiones religiosas, con gran peso de la Iglesia católica, que han dado lo mejor de sí.

«Lo hemos visto muy claro en esta crisis. Las cosas han funcionado muy bien cuando ha habido colaboración público-privada. Ahí, la sociedad civil se ha volcado. Todo lo que ha podido fallar o salir mal tiene mucho que ver con la falta de esa colaboración». Antonio Espinosa es CEO y fundador de Auara, una empresa social de agua embotellada que destina el 100 % de sus dividendos a un fin social: llevar agua potable a miles de personas sin acceso a ella. Durante los peores momentos de la pandemia, envió miles de botellas de agua a los hospitales.

130

profesionales de distinto ámbito forman parte de Equipo País

También es el impulsor de Equipo País, una iniciativa que agrupa a 130 líderes de diversos sectores que pretenden poner todo su conocimiento y propuestas al servicio de las autoridades para salir de la crisis en la que nos ha sumido la COVID-19. Se le ocurrió durante el confinamiento, aunque de una forma un poco desordenada, dice, «como todos estos proyectos». Se preguntaba dónde estaban los mejores líderes y el mejor talento para ayudar a España a salir de esta crisis y para sentar las bases del futuro del país, porque, en su opinión, «nos estamos quedando por el camino en muchos aspectos como la revolución tecnológica o la educación».

El primer fruto de esta idea ha sido el proceso elegido para la selección de representantes, producto de la inteligencia colectiva y colaborativa. Primero contaron con organizaciones que se dedican a la selección de líderes en distintos ámbitos, con las que completaron una lista de 1.000. Luego, estos líderes eligieron a quienes entre ellos consideraban los mejores. «Montamos una votación y fue un gran éxito. Participaron más de 400 y de ahí salió una lista de 130 personalidades, las más votadas, y que representan a seis áreas de actuación: educación, desarrollo social, modelo productivo, sostenibilidad, energía y recursos, innovación y tecnología, y sanidad».

Ashoka ayuda a resolver problemas sociales. gentes. Foto: Ana Sáenz de Miera

Este mes de septiembre, Equipo País ha entrado en una nueva fase, que tendrá como colofón la publicación a finales de octubre de tantos documentos como áreas hay con líneas de actuación y desarrollo estratégico a largo plazo. «Se trata de plasmar una visión para los próximos 20 años con propuestas que luego serán compartidas con el Gobierno y los partidos políticos. El objetivo es que se aborden las cuestiones del largo plazo y no se dejen de lado como hasta ahora, y generar un consenso entre las distintas fuerzas. Esto último puede ser posible en la medida de que será un documento que no sale de un partido, sino de un sector de la sociedad civil reconocido por su liderazgo y capacidades», añade Espinosa.

Contactos con el Gobierno

Ahora mismo, desde Equipo País se está eligiendo a los líderes que coordinarán cada área y diseñando un modelo de trabajo —va a ser remoto— lo más ágil, colaborativo y eficiente posible. Y siguen ampliando horizontes. De hecho, el pasado viernes se reunieron con el alto comisionado para España Nación Emprendedora, Francisco Polo, cargo que depende directamente del presidente del Gobierno.

Una de las líderes que aparece en la lista elaborada por Equipo País es Ana Sáenz de Miera, vicepresidenta global de Ashoka, la mayor red de emprendedores sociales del mundo —3.600 en 90 países—. Ahora mismo dirige, dentro de la organización, un programa —Next Now— que busca acelerar el cambio en aquellos problemas más acuciantes.

Desde Ashoka se han enfocado en los últimos meses en reforzar las redes de emprendedores y los proyectos ya existentes y que pueden dar solución a desafíos que plantea y va a plantear la pandemia. De hecho, muchas de las soluciones apoyadas por Ashoka a lo lo largo de los años son aplicables en estos momentos.

A Espinosa se le ocurrió la iniciativa Equipo País durante el confinamiento. Foto: Vanessa Gómez

Sáenz de Miera habla, por ejemplo, del caso de Ana Urrutia, que lleva años respondiendo a la falta de dignificación y humanización de las personas mayores y dependientes en residencias. Su propia experiencia la llevó a desarrollar un proyecto que se basa en la reducción de sujeciones físicas y químicas de las personas con dependencia y que ha desembocado en un nuevo modelo de cuidado, el Libera-Care, que certifica el impacto positivo de los cuidados en la calidad de vida de las personas. Una norma que ya ha acreditado a 120 centros y que ha servido durante la pandemia para establecer rigurosos protocolos de protección y cuidado.

Este es solo un ejemplo, pero Ashoka puede poner a disposición de los que toman decisiones, añade Sáenz de Miera, soluciones aplicables a este contexto y que se dirigen especialmente a la población más vulnerable. «Algunos gobiernos ya están utilizando este repertorio. Yo no dudaría en hacerlo, fuera del partido que fuera. Estas soluciones demuestran que se pueden cambiar las cosas. Si te mueves, lo puedes hacer», añade.

Otro de los líderes que están en la lista es Diego Isabel La Moneda, director del Foro NESI de Nueva Economía e Innovación Social. El pasado mes de mayo, lanzó el Plan A. Economía para la Vida, una iniciativa —al que se han sumado en torno a 100 líderes sociales y empresariales más de 70 entidades, además de casi 4.800 firmantes— cuyo objetivo es la promoción una economía al servicio de las personas y del planeta, y que se fundamenta en cinco pilares: economía con sentido, economía local y resiliente, reinvención del trabajo, economía solidaria y colaborativa, y economía circular y regenerativa.

Transformar, no reconstruir

Según explica a Alfa y Omega Diego Isabel La Moneda, la idea de esta propuesta también surgió durante el confinamiento y partiendo de la base de que «sin salud no hay economía y sin economía no hay salud». Primero se lanzó un documento con los principios fundamentales, en la base, y este verano han estado trabajando en propuestas concretas que presentarán en el mes de octubre a la clase política a nivel estatal, autonómico y local.

4.769

personas han apoyado el Plan A, un proyecto que busca la transformación del modelo económico

En su opinión, la pandemia y el sufrimiento generado debe servir no para reconstruir la economía tal y como estaba —«el modelo ya no funcionaba»—, sino «para transformar el modelo económico». De hecho, cree que esta idea es la que debería definir qué se hace con los fondos que nuestro país va a recibir de la Unión Europea. «Se debate en España qué hacer con los fondos, pero es un debate en un reparto de pequeños egoístas. Deberíamos preguntarnos qué país queremos, cómo queremos que sea el sector del turismo, de la alimentación, de la vivienda, de la energía… Estas son las preguntas que nosotros nos hemos hecho y que queremos trasladar como sociedad civil a las autoridades», concluye Isabel La Moneda.

Transversal y heterogénea

Son los adjetivos que mejor definen la lista de líderes de Equipo País. 130 personas que han demostrado una competencia excepcional en sus sectores. Entre ellos hay empresarios de éxito, emprendedores que se mueven en el ámbito de las startups o personas vinculadas al tercer sector o a la educación. Ana Botín (Santander), Antonio Brufau (Repsol), Amancio Ortega (Inditex) son algunos de los más conocidos, al igual que César Bona —que fue candidato al Global Teacher Prize, el Nobel de la educación—, el cirujano Pedro Cavadas o los filósofos Javier Gomá y Adela Cortina. De todos ellos, en torno a 50 ya se han comprometido a participar activamente en la elaboración de los documentos con propuestas que se enviarán al Gobierno y a los distintos grupos políticos.