La Santa Sede expulsa del sacerdocio al excardenal McCarrick
El Papa confirma el veredicto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que ha hallado culpable al ex purpurado estadounidense de «solicitación en confesión» y «violaciones del sexto mandamiento del Decálogo con menores y adultos, con el agravante de abuso de poder»
El ex cardenal estadounidense Theodore Edgar McCarrick, de 88 años, ha sido expulsado del sacerdocio. Lo ha anunciado este sábado la Congregación para la Doctrina de la Fe por medio de un comunicado.
El decreto final del proceso fue dictado el 11 de enero. Un mes después, el 13 de febrero, la Congregación para la Doctrina de la Fe desestimó los decretos del acusado y confirmó el veredicto de culpabilidad por los delitos de «solicitaciones en confesión» y «violaciones del sexto mandamiento del Decálogo con menores y adultos, con la circunstancia agravante del abuso de poder». La pena es la «dimisión del estado clerical».
El Obispo de Roma ha reconocido esa decisión como «definitiva y no sujeta a posterior recurso». La decisión fue comunicada a Theodore McCarrick el 15 de febrero.
Nuevas revelaciones durante el proceso abierto por Francisco
Según recuerda el portal vaticano Vatican News, en septiembre de 2017, la archidiócesis de Nueva York informó a la Santa Sede de las acusaciones hechas por un varón a McCarrick de haber abusado de él en la década de 1970, siendo la víctima un adolescente. El Papa ordenó abrir una investigación preliminar llevada a cabo por en Nueva York, tras la cual la documentación fue remitida a Doctrina de la Fe.
En junio de 2018, Secretario de Estado, cardenal Pietro Parolin, siguiendo las instrucciones del Pontífice, dio instrucciones para que McCarrick no ejerciera públicamente su ministerio sacerdotal.
Durante el proceso surgieron nuevas revelaciones, y el 28 de julio de 2018 Francisco –añade el portal vaticano– «acepta su renuncia al Colegio de Cardenales, ordenándole la prohibición del ejercicio del ministerio público y la obligación de llevar una vida de oración y penitencia». El último precedente de una expulsión del cardenalato data del pontificado de Pío XI, el jesuita francés Louis Billot, forzado a presentar su renuncia por no retractarse de su apoyo a la extrema derecha gala.
Tolerancia cero
La decisión de Doctrina de la Fe lanza un mensaje de firmeza a pocos días del comienzo en Roma de la cumbre sobre abusos sexuales a la que el Papa ha convocado a los presidentes de los episcopados.
Así lo subraya el portal Vatican News, recordando el comunicado del pasado 6 de octubre, que afirmaba que «tanto el abuso como su cobertura ya no pueden ser tolerados y un tratamiento diferente para los obispos que los han cometido o cubierto representa una forma de clericalismo que no debe aceptarse», al tiempo que reiteraba la urgente invitación del Papa Francisco «a unir fuerzas para combatir el grave flagelo de los abusos dentro y fuera de la Iglesia y para evitar que esos crímenes se cometan contra los más inocentes y más vulnerables de la sociedad».
También se cita la Carta al Pueblo de Dios, en la que Francisco decía, el pasado 20 de agosto, que «La única forma en la que tenemos que responder a este mal que se toma tantas vidas es vivirlo como una tarea que nos involucra y nos afecta a todos como Pueblo de Dios. Esta conciencia de sentirse parte de un pueblo y una historia común nos permitirá reconocer nuestros pecados y errores del pasado con una apertura penitencial capaz de dejarnos renovar desde dentro».