La prueba de mi verdad
La vida de santa Teresa de Jesús y su obra literaria son los protagonistas de La prueba de mi verdad: exposición que han preparado la Biblioteca Nacional y Acción Cultural Española, para poner en valor a la santa abulense en el V Centenario de su nacimiento
La prueba de mi verdad es un título extraído del poema de la santa A la profesión de Isabel de los Ángeles, que hoy denominaríamos algo así como declaración programática en su vida. Los comisarios de la exposición han elegido este poema porque irradia esa locura de amor que la santa tenía por Cristo y que ella podía expresar de un modo como sólo saben hacer los místicos.
Con ese punto de partida, la Biblioteca Nacional de España exhibe por primera vez manuscritos de la santa, junto a obras pictóricas que ilustran lo que dicen sus textos. La narración de la vida de santa Teresa, a partir de su obra escrita, marca el camino de la exposición, haciendo atractivos sus escritos a actuales y futuros lectores. Además, con sus 120 piezas, la exposición refleja la vinculación que la escritora tuvo con importantes personajes de su época, como la emperatriz María, la Casa de Alba, el rey Felipe II o fray Luis de León, dando cuenta de la relevancia del personaje, por su labor como fundadora y escritora.
Poner en valor a santa Teresa
Santa Teresa no necesita muchas presentaciones, aunque es verdad que el V Centenario está reflejando algunas facetas de su vida que habían permanecido veladas para algunos. La prueba de mi verdad nos aporta una visión de la santa abulense como una apasionada lectora desde su infancia, condición indispensable para que pudiera ser tan excepcional escritora. Igualmente, nos muestra su fortísima voluntad y decisión, tal y como se manifiesta en sus elecciones personales: su toma de hábito, la lucha por reformar el Carmelo, sus fundaciones…
Toda una vida que se plasma en un tipo de literatura enormemente visual gracias a las comparaciones que ella crea para que sus lectoras (monjas carmelitas) puedan entender fácilmente lo que quiere contar. La escritora necesitaba imágenes para su vivencia espiritual, y para ello recurría a la realidad que la rodeaba.
Esta particular cita con santa Teresa tiene lugar, en Madrid, en la Biblioteca Nacional de España, hasta el 31 mayo. Ojalá sirva para que muchos más se acerquen a la no siempre fácil lectura de santa Teresa, y puedan ahondar en este genial espíritu de quien ha hablado cara a cara con Jesús.
Sea mi gozo en el llanto,
sobresalto mi reposo,
mi sosiego doloroso,
y mi bonanza el quebranto.
Entre borrascas mi amor,
y mi regalo en la herida,
esté en la muerte mi vida,
y en desprecios mi favor.
Mis tesoros en pobreza,
y mi triunfo en pelear,
mi descanso en trabajar,
y mi contento en tristeza.
En la oscuridad mi luz,
mi grandeza en puesto bajo.
De mi camino el atajo
y mi gloria sea la cruz.
Mi honra el abatimiento,
y mi palma padecer,
en las menguas mi crecer,
y en menoscabo mi aumento.
En el hambre mi hartura,
mi esperanza en el temor,
mis regalos en pavor,
mis gustos en amargura.
En olvido mi memoria,
mi alteza en humillación,
en bajeza mi opinión,
en afrenta mi victoria.
Mi lauro esté en el desprecio,
en las penas mi afición,
mi dignidad sea el rincón,
y la soledad mi aprecio.
En Cristo mi confianza,
y de Él solo mi asimiento,
en sus cansancios mi aliento,
y en su imitación mi holganza.
Aquí estriba mi firmeza,
aquí mi seguridad,
la prueba de mi verdad,
la muestra de mi firmeza.