La ministra de Justicia: «La religión católica ha sido y es la más importante en España»
Durante la inauguración de las jornadas Constitución y diversidad religiosa, Dolores Delgado ha pedido «defender» la libertad de culto y la diversidad religiosa en España «frente a populismos y extremismos ideológicos»
La ministra de Justicia, Dolores Delgado, ha pedido «defender» la libertad de creencias y de culto frente a «populismos y extremismos ideológicos» en una sociedad española caracterizada por la «diversidad», donde las religiones minoritarias han pasado de representar un 1,7 por ciento de la población en 2006 a un 3,8 por ciento en 2018.
Así lo ha reclamado Dolores Delgado este jueves 17 de enero durante la inauguración de las jornadas Constitución y diversidad religiosa que han tenido lugar en la sede del Ministerio de Justicia, en el marco de las celebraciones por los 40 años de la Constitución española.
«Es cierto que la diversidad religiosa y cultural ha generado un debate acerca de nuestra identidad como sociedad pero eso no debe significar que volvamos a planteamientos retrógrados que parecían superados en la propia elaboración de la Constitución de 1978. Asistimos a un debate en el que debemos defender, frente a populismos y extremismos ideológicos, la libertad de expresión, la libertad de conciencia y de culto», ha enfatizado Delgado.
La ministra ha realizado un repaso por las cifras de la realidad religiosa de España. Así, ha precisado que en el registro del Ministerio de Justicia hay inscritas un total de 19.000 entidades religiosas, de las cuales 13.600 son católicas (el 71,6 por ciento) y las 5.400 restantes, de otras confesiones como evangélicos, judíos, musulmanes, ortodoxos, budistas, testigos de Jehová o mormones, entre otras.
«Esto refleja una pluralidad y una heterogeneidad en las creencias. Vivimos en un mundo globalizado y en España se ha constatado un incremento de otras confesiones», ha enfatizado Delgado. En concreto, ha indicado que las religiones minoritarias en España han pasado de representar un 1,7 por ciento de la población en 2006 a un 3,8 por ciento en 2018, lo que supone un aumento de más de dos puntos en los últimos 12 años.
Asimismo, ha citado el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) para señalar que un 66,2 por ciento de los españoles se definen como católicos pero que un 59,4 por ciento de los que se definen como creyentes de alguna religión nunca van a misa u otros servicios religiosos. «Existe una declaración de sentimiento de la religión católica», ha apuntado.
La ministra ha afirmado que la religión católica «ha sido y es la más importante» en España y «forma parte de la cultura y la idiosincrasia» del país. Según ha recordado, fue la religión del Estado hasta 1931 y tras un paréntesis con la Constitución de la República, volvió a serlo hasta que la Constitución de 1978 declaró el Estado aconfesional.
Además, ha retrocedido hasta el siglo XIX para recordar que la Constitución de 1812, «absolutamente avanzada» en unos aspectos para su tiempo, sin embargo decía que la religión del Estado era y sería «perpetuamente» la católica apostólica romana.
Frente a aquel Estado confesional, la sitación actual de «pluralidad y diversidad» ha sido posible, según ha concretado Delgado, gracias a la Constitución de 1978 pero también a cuatro hitos: los Acuerdos con la Santa Sede de 1979 -que sustituyeron el Concordato-, la Ley de libertad religiosa de 1980, los Acuerdos de cooperación con musulmanes, judíos y evangélicos de 1992, y la creación de la Fundación Pluralismo y Convivencia.
En esta línea, ha destacado que conmemoraciones como la de la Constitución ayudan a «poner el foco» en los «valores» que tiene la sociedad española, como el de la libertad religiosa que ha calificado como «esencial».
«Lo que somos como país es el fruto de una historia que habla durante siglos de convivencia de culturas, de tolerancia, respeto, concordia y comprensión hacia lo diferente, una convivencia que forjó nuestra identidad pero también una historia de falta de libertad y persecución en algún tiempo; y hoy como sociedad moderna debemos seguir garantizando la libertad de culto, la libertad y diversidad religiosa porque nos enriquece», ha zanjado.