La Mesa por la Hospitalidad denuncia las «trabas» a los migrantes para acceder a la atención sanitaria
Apela, en su comunicado con motivo del Día Internacional del Migrantes, a «evitar dolores innecesarios»
Con motivo del Día Internacional del Migrante, que se celebra este sábado, 18 de diciembre, la Mesa por la Hospitalidad de la Iglesia en Madrid ha emitido un comunicado en el que subraya que los flujos migratorios son «un elemento omnipresente e inevitable en la historia de la humanidad» y apela a «evitar dolores innecesarios», así como «cualquier vulneración, directa o indirecta, de los derechos humanos».
Aludiendo a las «razones traumáticas» que llevan a muchas personas a dejar sus hogares y países, lo primero que pide la mesa son «políticas mucho más proactivas de cooperación internacional». También reclama «posicionamientos sin ambages por parte de nuestro Gobierno contra las dictaduras que originan la expulsión de conciudadanos», y que se apueste por la «cooperación multilateral» para acabar con la corrupción y las redes que se aprovechan de los migrantes.
Itinerarios reglados y rechazo de limbos jurídicos
Asimismo, igual que ha hecho en otras ocasiones desde su nacimiento, la Mesa por la Hospitalidad aboga por establecer «itinerarios reglados, respetuosos con el derecho a emigrar» y que eviten «consecuencias trágicas», como recordó el Papa al hablar de «Mare Mortuum» en su reciente visita a Lesbos.
En esta línea, apuesta también por fijar marcos normativos que no vean al migrante como «distorsión y amenaza», sino como «un factor de enriquecimiento social», e incide en que «tenemos que ser exquisitos en el cuidado de los derechos» de quienes ya están en España. «Deben terminar los irracionales limbos jurídicos que obligan a las personas desplazadas a no poder trabajar en condiciones dignas y tener que ser subsidiados de una u otra manera para poder sobrevivir», asevera, al tiempo que lamenta las situaciones de «irregularidad sobrevenida» por la «falta de agilidad en la renovación de la documentación» y el «perjuicio» que esto genera.
«¡Los virus no entienden de leyes de extranjería!»
En el caso de la Comunidad de Madrid, la Mesa por la Hospitalidad muestra su «preocupación» por las «trabas y dificultades burocráticas para acceder a la atención sanitaria» y denuncia que se niegue «el acceso a personas sin permiso de residencia que lleven menos de tres meses en España» sin considerar «vulnerabilidades» o la necesidad de «atención urgente», o lo complicadas que resultan ciertas gestiones. «La atención sanitaria y en especial la atención primaria son esenciales para asegurar la salud de cada persona y de la ciudadanía en su conjunto», añade, «máxime en una situación de emergencia sanitaria» como la provocada por la pandemia.
«Todos somos responsables de la suerte de todos –remarca–. Los derechos humanos son una malla tupida que se asienta en el deber de cada uno de proteger la suerte de los más vulnerables. Romper esa valiosa red […] constituye una imperdonable afrenta a la ética y una provocadora amenaza a la paz y a la salud de todos. Seguimos sin aprender que ¡los virus no entienden de leyes de extranjería!».
Tras abundar en que solo las «políticas públicas de protección social universal» tanto para autóctonos como inmigrantes podrán «asegurar una convivencia en paz y con cohesión social», la mesa concluye recordando una reciente carta del arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, en la que reivindica «la acogida, la protección, la promoción y la integración de las personas inmigrantes y refugiadas» para caminar hacia «un nosotros cada vez más grande».
Sobre la Mesa por la Hospitalidad
La Mesa por la Hospitalidad, iniciativa de acogida a inmigrantes y refugiados en situación de emergencia, fue impulsada por el arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, en 2015. Está compuesta por Cáritas Diocesana de Madrid, Comunidad de Sant’Egidio Madrid, CONFER Madrid, Delegación Episcopal de Movilidad Humana, Justicia y Paz Madrid, Pueblos Unidos y Sercade (Servicio Capuchino para el Desarrollo y la Solidaridad).