La lucha contra la esclavitud de los braceros de la caña de azúcar - Alfa y Omega

La lucha contra la esclavitud de los braceros de la caña de azúcar

Los misioneros dominicos de República Dominicana llevan años denunciando los graves abusos laborales de la industria azucarera

Ester Medina
En el informe 'Flores de dignidad en tierra de sangre' se expone el aumento de la represión y la violencia en República Dominicana
En el informe Flores de dignidad en tierra de sangre se expone el aumento de la represión y la violencia en República Dominicana. Foto: Reuters / Oswaldo Rivas.

En la provincia de El Seibo, en el este de la República Dominicana, los misioneros dominicos llevan décadas luchando contra los abusos laborales por parte de la azucarera Central Romana. Fray Miguel Ángel Gullón Pérez, misionero dominico, denuncia en un texto escrito a OMP que «se sigue esclavizando a los braceros que pican la caña de azúcar de sol a sol sin ningún tipo de prestaciones laborales y de salud».

Los religiosos han sacado a la luz las prácticas injustas y explotadoras que afectan a miles de trabajadores de la zona, incluyendo a un gran número de inmigrantes haitianos. «Abuso de vulnerabilidad, aislamiento, retención de salarios o condiciones de trabajo abusivas» son algunos de los motivos por los que exigen la salida de Central Romana de sus tierras ya que además controla más del 70 % de las tierras.

En 2019 los dominicos de las selvas amazónicas publicaron el informe Flores de dignidad en tierra de sangre, en el que se documentaron las condiciones inhumanas en las que los trabajadores de la caña de azúcar se ven obligados a trabajar. Sin embargo, a pesar de la presión internacional y las sanciones impuestas por entidades como la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), los abusos continúan.

Fray Miguel Ángel es contundente a la hora de denunciar la corrupción y la impunidad de las instituciones: «sigue el trabajo forzoso e infantil a la vez que pagan a los medios de comunicación para ensalzar sus obras sociales que son financiadas solidariamente por organismos internacionales».

En medio de esta lucha, las comunidades se mantienen firmes en su compromiso de buscar justicia para los trabajadores y sus familias, y continúan denunciando los abusos y exigiendo la restitución de la dignidad de las familias afectadas y la expulsión de la azucarera Central Romana de las tierras.