La Iglesia y san Valentín: «Nos tenemos que poner de parte de los novios»
La diócesis de Salamanca organiza una Semana de los Enamorados con motivo de san Valentín. «En este día todo el mundo se felicita y la Iglesia no se puede quedar atrás», dice el delegado de Familia
«San Valentín se ha convertido en una fiesta civil más que religiosa, pero es necesario que la Iglesia esté allí. Es una semana muy oportuna para nosotros. Todo el mundo se felicita y nosotros no podemos quedarnos atrás», afirma Florentino Gutiérrez, responsable de la Delegación de Familia y Vida de Salamanca, que esta semana ha organizado una Semana de los Enamorados con motivo de san Valentín.
La Semana comenzó el lunes con la emisión de un vídeo en el que el delegado habló sobre el sacramento del matrimonio, «el gran regalo que la Iglesia tiene preparado para los novios». La siguiente actividad es una mesa redonda online que tendrá lugar este viernes sobre la evolución del noviazgo en los últimos años y las perspectivas de futuro, y concluirá este domingo con una Eucaristía en la catedral con especial participación de los novios.
Gutiérrez reconoce que hay parejas «con una buena preparación que viven con interés su formación y su relación con mucha fidelidad», pero el amor hoy «es muy líquido» y hay muchos que «andan más dispersos».
El delegado de Familia y Vida de Salamanca lo atribuye a que «hoy los novios tienen más dificultades que antes». Por eso, «nos tenemos que poner de su parte. Hay quien se quiere casar pero no tiene las condiciones económicas, y también la fe está muy deteriorada. Hay otros que vienen de divorcios… Es muy complicado, pero la Iglesia debe estar muy al lado de unos y de otros».
En este sentido, Gutiérrez afirma que «el Papa Francisco habla en Amoris laetitia de la gradualidad en el amor. Debemos intentar llegar a todos y dar a todos una palabra de aliento, estén en el nivel de fe y en las circunstancias de vida que sean», y decir a todos que «aquí estamos para acompañarles a que puedan dar pasos hasta la cumbre del amor, cada uno a su ritmo y sin empujarles».
El delegado señala también que «si todos los novios buscan crecer en amor, eso es para felicitarles, porque Dios es amor y si buscan el amor están buscando a Dios, lo sepan o no. Ese es el camino».