La Iglesia promueve un «voluntariado verde»
La Conferencia Episcopal organiza el seminario ¿Empezamos por casa? para animar a las parroquias y comunidades católicas a la «conversión ecológica»
¿Empezamos por casa? Cuatro años después de la publicación de la encíclica Laudato si, quedan importantes focos de resistencia en la Iglesia que consideran que la ecología poco o nada tiene que ver con la fe. Esto explica que se haya elegido este título para el III Seminario de Ecología Integral que organiza la Comisión Episcopal de Pastoral Social del 5 al 7 de julio en Madrid. «La intencionalidad es clara», reconoce el director de este departamento de la Conferencia Episcopal, Fernando Fuentes. Si en 2018 estas jornadas sirvieron de lugar de encuentro y debate con partidos políticos, grandes compañías energéticas, profesores universitarios y otros agentes de la sociedad civil, en las de 2019 se vuelve a un planteamiento similar al del primer año, con el objetivo de presentar experiencias que puedan servir de inspiración para esa «conversión ecológica» que pide el Papa Francisco. Se incluyen desde propuestas de ocio y tiempo libre con jóvenes llevadas a cabo por los Scouts, a iniciativas sociales con reclusos (diócesis de Castellón) y población en situación o riesgo de exclusión (los Traperos de Emaús de Barcelona y el Proyecto re- de Cáritas, las tiendas de ropa de segunda mano que sustituirán a los tradicionales roperos parroquiales).
El mayor reto para Fuentes, sin embargo, es que estos cambios lleguen al día a día de los parroquias. Es lo que va consiguiendo en Francia la red Èglise Vert, impulsada por la Conferencia Episcopal gala, cuya directora, Elena Lasida, contará cómo se están poniendo en marcha en diversas comunidades parroquiales grupos dedicados a la ecología integral, al mismo nivel que los encargados de la catequesis o la liturgia.
Esa misma línea sigue en Madrid la Comisión Diocesana de Ecología Integral, otra de las experiencias que presentará este seminario. «Si no en todas las parroquias, al menos en todas las vicarías queremos que haya agentes de pastoral en ecología integral encargados de fomentar formas de vivir más cristianas y sostenibles, que fomenten entre las comunidades cristianas una mayor conciencia ecológica y social», explica el coordinador de la entidad, Carlos Jesús Delgado.
La comisión diocesana colabora con diversas universidades públicas y privadas madrileñas (Comillas, Rey Juan Carlos y Alcalá de Henares) para ofrecer formación a estos agentes de pastoral, al tiempo que presta asesoría a las parroquias para, en función de sus posibilidades, «empezar una transformación ecológica». Una de las novedades para el futuro inmediato será la puesta en marcha de un «voluntariado verde» que colabore en labores como la sensibilización ciudadana, la recogida de basura o la reforestación de los bosques destruidos por los incendios, como el que ha arrasado estos días el entorno de San Martín de Valdeiglesias. «Lo estamos hablando con ayuntamientos y ONG», explica Delgado. Un criterio básico de actuación es «sumar fuerzas con otros». «Si ya está haciendo alguien el trabajo, le apoyamos, sin pisarle el terreno a nadie. Y si vemos que hay un vacío, lo rellenamos nosotros».
Esta línea de colaboración y diálogo con otros grupos sociales –prosigue– se extenderá al ámbito de «la denuncia profética». Ha habido reuniones con los impulsores las protestas juveniles del #FridaysForFuture y con las Madres por el Clima. También «se valorará el apoyo a iniciativas ciudadanas en defensa de Madrid Central», el área restringida al tráfico de coches en la capital que el nuevo Consistorio está estudiando replantear.