La Iglesia en Arabia conmemora a 4.000 mártires asesinados hace 1.500 años

La Iglesia en Arabia conmemora a 4.000 mártires asesinados hace 1.500 años

El pasado sábado se inauguró un Año Jubilar en honor de san Aretas y sus compañeros. Además del testimonio para la minoría cristiana, se ha suscitado un gran interés por la investigación histórica sobre ellos

María Martínez López
Apertura Puerta Santa en honor de los mártires de Arabia
Momento de la apertura de la Puerta Santa, solo dos años después de la consagración de la catedral de Nuestra Señora de Arabia. Foto: www.iubilaeum2025.va.

«Es interesante saber que en esta zona [de Arabia] hubo comunidades cristianas, monasterios, iglesias, obispos», subraya Aldo Berardi, vicario apostólico de Arabia del Norte, en entrevista con medios vaticanos. De hecho, en el sur de la península existió por ejemplo Nayrán, una antigua ciudad cristiana. Allí nació en el año 427 san Aretas, asesinado junto con otros 4.000 cristianos en una persecución preislámica ordenada por el rey de Himyar, en el actual Yemen.

Según la tradición Dhu Nuwas, el monarca, se convirtió al judaísmo y comenzó a actuar contra los cristianos de forma sistemática contra los cristianos. Ordenó quemar iglesias, obligar a la gente a convertirse y matar a quien se negara. Sacerdotes, diáconos, monjas y laicos fueron arrojados a un pozo y quemados vivos. Se cuenta que incluso un niño de 5 años murió arrojándose al fuego para estar con su madre.

Para conmemorar a estos millares de mártires que derramaron su sangre hace 1.500 años, la Iglesia en la región inauguró el pasado sábado un Año Jubilar que se prolongará hasta el 23 de octubre de 2024. Justo cuando se cumplía un año del viaje del Santo Padre a Baréin, en la misma catedral de Nuestra Señora de Arabia que él visitó, el vicario Berardi abrió la Puerta Santa.

Persecuciones de ayer y hoy

La homilía de la celebración corrió a cargo del nuncio en Baréin, Kuwait y Catar, Eugene Martin Nugent. En sus palabras, reconoció que «no es fácil ser cristiano en nuestro tiempo, y muchos cristianos son perseguidos». Pero «la vida en el pasado no era más fácil que hoy», recordó Berardi a los fieles en un texto preparado para la ocasión. Tanto hace 1.500 años como en tiempos más recientes, «los mártires mantuvieron la fe cristiana frente a la burla, la persecución y las amenazas. Permanecieron firmes en la fe», que se fue transmitiendo «como un faro en la tormenta y una luz en la noche», que indican el camino «para quienes miran a Cristo y lo siguen». Echar la mirada atrás, hacia este testimonio, «nos inspira».

«Hoy somos testigos del Resucitado con nuestras palabras y nuestras obras, con nuestras debilidades y nuestras fortalezas, con el mismo amor que animó a los mártires», escribe Berardi. «A nosotros nos toca levantarnos y dar testimonio de Cristo con una vida honesta y coherente, una vida entregada por amor y orientada hacia el bien y lo bello, hacia el amor fraterno y el compromiso por la paz, la justicia y la tolerancia». Un mensaje de gran relevancia en un contexto en el que la comunidad cristiana está compuesta sobre todo de trabajadores migrantes que viven en una situación de bastante vulnerabilidad religiosa y social.

Tercera visita del Papa

También la catedral de San José, en Abu Dabi, tendrá su propia Puerta Santa. La abrirá el próximo jueves Paolo Martinelli, vicario apostólico de Arabia del Sur. El Año Jubilar, que ofrece la posibilidad de obtener la indulgencia plenaria, se prolongará hasta el 23 de octubre de 2024. Durante el mismo, se espera que llegue a Baréin una reliquia de san Aretas como regalo del patriarca ecuménico de Constantinopla, Bartolomé.

Esta celebración histórica coincidirá con la visita del Papa Francisco a Dubái del 1 al 3 de diciembre para participar en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP28. En declaraciones a los medios vaticanos, el vicario Berardi mostró su satisfacción por que este tercer viaje a la región —después del de Abu Dabi en febrero de 2019 y del de hace un año— volverá a poner el foco en la realidad de la Iglesia en la península arábiga, «que permanece un tanto a oscuras desde hace muchos años».

Si en las visitas anteriores «despertó el interés por el diálogo religioso y ecuménico», en este caso el Papa se dedicará sobre todo a promover el cuidado de la creación. En cualquier caso, «es una alegría saber que el Papa está interesado en esta zona».

Investigación e interés entre los no cristianos

El Año Jubilar, además de su componente espiritual, está suponiendo «un redescubrimiento de las huellas de las comunidades cristianas de las que ahora somos herederos», explica a los medios vaticanos el vicario de Arabia del Norte, Aldo Berardi. Esto ha suscitado «un entusiasmo muy importante» por la investigación de fuentes históricas y «la recuperación de muchos textos antiguos». Por otro lado, a raíz de esta toma de conciencia sobre el vínculo con el pasado, se están dando distintas expresiones artísticas y literarias. Y, por último, se ha suscitado la curiosidad de la mayoría no cristiana, que «se preguntan qué pasó y redescubren las comunidades que vivieron aquí antes de la fundación del islam».