La Iglesia de RD Congo pide una investigación internacional sobre el conflicto en Kivu

Los obispos de la República Democrática del Congo han solicitado a la comunidad internacional una investigación independiente sobre los ataques de grupos armados en el este del país, aparentemente vinculados a una «infiltración de los ruandeses» y a la «explotación y el tráfico ilícito de minerales». Es una de las peticiones que presentó la semana pasada a la Unión Europea una delegación de la Conferencia Episcopal del país (CENCO), junto con el envío de ayuda humanitaria, más medios para la misión de la ONU y apoyo para iniciativas de desarme.

Es la situación que «más nos preocupa», afirman. En el conflicto, están presentes milicias locales y extranjeras, entre las cuales «buena parte no tienen ninguna reivindicación política», algo digno de análisis. Los obispos se hacen eco también de la convicción de muchos compatriotas —entre los que están incluidos también ellos— de que «existe un plan de balcanización».

En el diagnóstico de la situación en su país que ha presentado del 20 al 22 de enero la delegación, encabezada por el presidente del episcopado, monseñor Marcel Utembi, aparecen algunas luces, como el descenso de la crispación política tras el cambio de Gobierno, después de varios años de tensión por los retrasos electorales y la polémica elección de Félix Antoine Tshisekedi como presidente.

En el último año, bastantes exiliados han regresado al país, se ha liberado a prisioneros, hay más libertad en los medios de comunicación y se han restituido los derechos de los opositores. Además, varios grupos armados se han desmovilizado y se han recuperado las relaciones diplomáticas con los países vecinos, Occidente, Asia o la Unión Europea. Otro paso adelante positivo es la legislación sobre la gratuidad de la enseñanza.

Sin embargo, persisten sombras y problemas. Además de la corrupción a todos los niveles (por ejemplo en la «sumisión del poder judicial a las fuerzas políticas» y el desvío de fondos públicos), se detectan «tensiones perceptibles» en la coalición de Gobierno. Y, por supuesto, está el conflicto en el este del país, unido a la explotación de recursos y vinculado por otro lado con comportamientos dudosos por parte del Ejército y la Policía.

Pero también sombras persistentes, como dicho conflicto o la corrupción. Días antes, monseñor Utembi participó en el Vaticano en los actos con motivo de la visita del presidente congoleño, Félix Antoine Tshisekedi. Durante la misma, se ratificó el acuerdo marco entre este país y la Santa Sede, y el presidente invitó al Papa a visitar el Congo en 2021.