«La fraternidad es el ancla de salvación de la humanidad» - Alfa y Omega

«La fraternidad es el ancla de salvación de la humanidad»

El Papa Francisco insiste en el Día Internacional de la Fraternidad Humana en que «no es tiempo para la indiferencia»

Redacción
El Papa Francisco ha enviado un vídeo a la conferencia internacional que se celebra en Dubái.

El Papa ha alentado a todas las sociedades, culturas y religiones a vivir en «fraternidad» para contrarrestar «las pequeñas guerras actuales» que constituyen una «tercera guerra mundial en pedazos», al constatar que «no es tiempo para la indiferencia», informa Europa Press.

«Es fundamental ser solidarios los unos con los otros. Y por eso, hoy, lo repito: no es tiempo para la indiferencia, o somos hermanos o todo se derrumba», ha señalado el Papa en un mensaje enviado a la conferencia internacional que se desarrolla en Dubái en conmemoración del Día Internacional de la Fraternidad Humana.

Así, ha considerado: «Lo constatamos en las pequeñas guerras actuales, en esta tercera guerra mundial en pedazos. Cómo se destruyen los pueblos, cuánta hambre pasan los niños, cómo se derrumba la educación. Es una destrucción. O somos hermanos o todo se derrumba».

Si bien ha reconocido que el camino de la fraternidad es «largo» y «difícil», también ha destacado que es el «ancla de salvación para la humanidad». El Pontífice ha exhortado así a que ante los tiempos de «conflicto y oscuridad» que vive la humanidad se oponga «el signo de la fraternidad que, acogiendo al otro y respetando su identidad, lo impulsa a recorrer un camino común».

Con este mensaje, el Pontífice ha participado en la conferencia internacional sobre la Fraternidad Humana y la Alianza para la tolerancia global que se desarrolla en Dubái con la participación del gran imán de Al Azhar, Ahmed al Tayeb. Para Francisco, la fraternidad es «una defensa contra el odio, la violencia y la injusticia».

Francisco ha explicado así que la «fraternidad es uno de los valores humanos y universales que debería estar en la base de las relaciones entre los pueblos, de manera que cuantos sufren o son desfavorecidos no se sientan excluidos y olvidados, sino acogidos, sostenidos como parte de la única familia humana».