La España de los rebrotes: bajan los aforos permitidos en algunas iglesias - Alfa y Omega

La España de los rebrotes: bajan los aforos permitidos en algunas iglesias

El arzobispado de Valladolid ha asegurado que la limitación en el número de asistentes a una celebración litúrgica, limitado en esta diócesis a 25 personas, «nos llena de perplejidad» al «contrastar esta medida con la experiencia del extraordinario comportamiento de prevención e higiene llevado a cabo por sacerdotes y laicos en nuestros templos»

José Calderero de Aldecoa
Foto: EFE/Luis Tejido

Con el COVID-19 fuera de control en España, algunas comunidades autónomas han decretado el confinamiento de parte de su territorio o la limitación de algunos de los derechos de los ciudadanos. Es el caso de Valladolid y Salamanca, que desde hoy se encuentran en fase 1, lo que incluye una serie de restricciones en las reuniones, en el ámbito de la hostelería y también en el de las celebraciones litúrgicas, que ha sido restringidas en ambas localidades a 25 personas.

Lo mismo ha ocurrido en Galicia. En Arteixo, parte de la ciudad de Lugo, Orense, Santiago, Santa Comba, Carballo y Alaracha, solo 25 personas podrían ir a Misa al mismo tiempo y 50 si la celebración eucarística es en el exterior.

Ante esta situación, el arzobispado de Valladolid ha asegurado que la limitación en el número de asistentes a una celebración litúrgica, que en ningún caso podrá superar un tercio de su aforo, «nos llena de perplejidad» al «contrastar esta medida con la experiencia del extraordinario comportamiento de prevención e higiene llevado a cabo por sacerdotes y laicos en nuestros templos».

La Iglesia vallisoletana también considera esta medida «desproporcionada», algo que «se pone de manifiesto al tratar de la misma manera a todos los templos». En este sentido, critica que la Junta de Castilla y León haya utilizado el «el criterio del número absoluto y no el de porcentaje de aforo, como se ha hecho en todos estos meses».

Con todo, desde el arzobispado aseguran que quieren «seguir colaborando en las medidas preventivas y también en llamar a la responsabilidad ciudadana». Asimismo, quieren «transmitir confianza, esperanza y solidaridad en este momento difícil para ciudadanos y gobernantes».

Por último, invitan a orar a la Virgen de San Lorenzo para que interceda ante el Señor por el final de la pandemia y para que sepamos vivir este tiempo con confianza, fraternidad y responsabilidad».

Extrema limitación de la libertad religiosa

Por su parte, la diócesis de Salamanca denuncia en un comunicado «la extrema limitación del ejercicio de la libertad religiosa que impone el nuevo criterio sanitario» y asegura no tener «motivo alguno para valorar la nueva norma como razonablemente justificada». Por ello, «solo nos queda la posibilidad de mostrar la perplejidad, el desacuerdo y el malestar» ante una norma que, además, carece «de lógica interna y de sentido de la proporción y de la equidad, que trata de forma igual situaciones muy diferentes. ¿Cómo va ser razonable y equitativo poner el mismo límite numérico de personas asistentes en espacios de amplitud tan diferente como la Catedral y la Iglesia de San Sebastián?».

Sin embargo, después de recordar que la comunidad diocesana ha sido «responsables en la aplicación y cumplimiento de las orientaciones y normas de la autoridad sanitaria —lo hemos considerado nuestro deber como ciudadanos y cristianos»—, la iglesia salmantina asegura querer «seguir colaborando al logro del bien común y de la salud pública, aun con la libre renuncia al ejercicio de algunas expresiones del derecho de libertad religiosa, como lo hicimos constar expresamente al decidir el cierre de las iglesias».

Prohibido asistir a lugares de culto

En la localidad valenciana de Benigánim también tienen limitada la asistencia a los lugares de culto, si bien es cierto que no de forma tan extrema como la Conserjería de Sanidad de Valencia planteó en un inicio.

En su primer decreto, la sanidad valenciana prohibió la asistencia a los lugares de culto y tan solo permitía a 15 personas acudir a los velatorios que se celebraran al aire libre, y de 10 en espacios cerrados.

Sin embargo, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 de Valencia anuló la resolución de Sanidad en la que se establecía estas medidas al considerarlas «incluso más gravosas que las incluidas en el real decreto de declaración del Estado de alarma».

Tras la actuación del juzgado, la Consejería tuvo que modificar su decreto y finalmente estableció que los actos de culto se podrían celebrar en los templos con las asistencia de hasta un tercio de sus fieles, siempre respetando las normas de seguridad, de uso de la mascarilla y distanciamiento social.

Confusión en Canarias

En el caso de Canarias lo que ha ocurrido es que la diócesis entendió que el Gobierno insular limitaba a 10 personas la asistencia a las celebraciones litúrgicas. Entonces, «entramos enseguida en contacto y diálogo con las autoridades del Gobierno, y manifestamos nuestro parecer, confusión y preocupación», publicó en un comunicado la Iglesia local.

Pero se trataba tan solo de una equivocación. «Las celebraciones de la comunidad cristiana no son eventos, reuniones que se acuerdan celebrar en un determinado lugar y momento y para las que se pide autorización; son actos de ordinario cumplimiento de muchos miembros de la comunidad».

Por lo tanto, la reducción del número de fieles no tenía lugar y «volvemos a la práctica que estábamos utilizando en fidelidad a la resolución del 20 de junio: Aforo del 75 %, uso de gel hidroalcohólico, limpieza de manos, uso de mascarilla, distancia social, indicación de itinerarios y de ocupación de asientos, etc.», concluye la diócesis de Canarias