La aportación de los fieles, la mayor partida en la cuenta de resultados de la diócesis de Madrid

La archidiócesis de Madrid también quiere aprovechar el Día de la Iglesia Diocesana para «dar las gracias a todos los que participan en la vida de la Iglesia», dice el delegado de Economía y Administración General, José María Albalad. «Gracias a su colaboración, la Iglesia de Madrid puede ser luz y esperanza». Una colaboración que, según Albalad, es «muy diversa». En primer lugar, destaca «la oración, que es el alma de todas las actividades que realizamos y sin la que no hay fruto posible». Del mismo modo, el tiempo y las cualidades que aportan los fieles, que «no abre telediarios o protagoniza vídeos virales», pero sin la que «no sería posible atender toda la actividad que se realiza».

«Evidentemente, también queremos dar las gracias por la colaboración económica». No es para menos. La cuenta de resultados del año 2024 de la archidiócesis revela que el 38,56 % de los ingresos ordinarios provienen de la aportación voluntaria de los fieles, a través de las colectas parroquiales o suscripciones. Al final, lo recaudado en esta partida asciende a más de 52 millones. «Es una muestra del compromiso de los madrileños, que confían en la Iglesia para cumplir su misión evangelizadora y también como institución clave por su contribución al bien común», subraya.

A pesar de los números, José María Albalad reconoce que «las necesidades de la Iglesia en Madrid para cumplir su misión superan los recursos disponibles». Por tanto, «invitamos a que cada fiel se pueda plantear tres preguntas: ¿cómo estoy haciendo rendir el tiempo que Dios me ha dado? ¿Cómo estoy utilizando esos dones y talentos recibidos? ¿Cómo estoy colaborando en función de mis posibilidades económicas?».

Entre las necesidades, el delegado habla del reto de la construcción de nuevos templos «para que la Iglesia mantenga esa presencia en los barrios al servicio de los vecinos y para que las parroquias, como dice el cardenal, sigan siendo casas vivas de comunión y misión». Hay muchos lugares donde se están acometiendo obras y «todo esto tiene un coste que va a exigir la implicación de todos».

Por último, el delegado de Economía subraya la importancia de la transparencia, que fue una de las apuestas estratégicas que marcó el arzobispo al inicio de su pontificado. En este contexto, el último ranking de la Fundación Haz reconoce a Madrid como «diócesis transparente». Al mismo tiempo, el mapa Infoparticipa de la Universidad Autónoma de Barcelona, que evalúa la transparencia de distintas webs, ha concedido a la archidiócesis el sello de transparencia con un cumplimiento del 97 % de los indicadores. El delegado cree que estos avances, «lejos de invitar a relajación, son solo el inicio de un camino y un reflejo del compromiso de la diócesis por la transparencia y la rendición de cuentas».