Jubileo de los Misioneros de la Misericordia: «La conversión y el perdón son caricias del Señor» - Alfa y Omega

Jubileo de los Misioneros de la Misericordia: «La conversión y el perdón son caricias del Señor»

En su mensaje, el Papa les ha animado a que «estén atentos en la escucha, dispuestos a acoger y constantes en el acompañamiento». Más de 1.200 sacerdotes son instituidos en este ministerio en todo el mundo

Ester Medina Rodríguez
Misioneros de la Misericordia peregrinando este fin de semana hacia la basílica de San Pedro
Misioneros de la Misericordia peregrinando este fin de semana hacia la basílica de San Pedro. Foto: Vatican News.

Este fin de semana ha tenido lugar en Roma el sexto gran evento de este Año Santo de la esperanza: el Jubileo de los Misioneros de la Misericordia, que ha reunido a más de 500 sacerdotes de países como estados Unidos, Polonia, México, Eslovaquia o Filipinas. A ellos, el Papa les ha dado las gracias «porque con su servicio dan testimonio del rostro paterno de Dios, infinitamente grande en el amor, que llama a todos a la conversión y nos renueva siempre con su perdón». Lo ha hecho a través de un escrito, ya que con motivo de su recuperación no ha estado presentes en los actos.

En este sentido, el mensaje del Santo Padre ha sido leído por Rino Fisichella, pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización, que ha presidido este sábado la oración del Santo Rosario en la gruta de Lourdes de los Jardines Vaticanos. «Conversión y perdón son las dos caricias con las que el Señor enjuga toda lágrima de nuestros ojos; son las manos con las que la Iglesia nos abraza a nosotros pecadores; son los pies sobre los que caminamos en nuestra peregrinación terrena», ha reflexionado Francisco, después de expresar que le hubiera gustado mucho poder estar presente en el evento.

Además, el Pontífice les ha animado a que, «en su ministerio de confesores, estén atentos en la escucha, dispuestos a acoger y constantes en el acompañamiento de cuantos desean renovar su vida y regresar al Señor», que es quien «nos transforma interiormente» y nunca nos abandona.

El ministerio de misionero de la misericordia fue instituido por el Papa Francisco en 2015 con ocasión del Año Santo extraordinario de la Misericordia y se encuentra en permanente aumento, llegando a más de 1.200 los sacerdotes instituidos alrededor del mundo. A ellos, por ejemplo, se les concede la facultad especial de perdonar incluso los pecados reservados a la Sede Apostólica.