José Cobo valora «la lucha, el esfuerzo y el corazón» de Osoro al frente de Madrid
La Universidad Eclesiástica San Dámaso rinde homenaje al arzobispo emérito de Madrid en un acto en el que también ha intervenido el cardenal Blázquez
El paso del cardenal Carlos Osoro por Madrid «ha sido una siembra grande en una Iglesia grande muy vinculada a Pedro», ha dicho este jueves el cardenal José Cobo en el homenaje que ha rendido la Universidad Eclesiástica San Dámaso al que fue su gran canciller entre 2014 y 2023.
«Hacer las cosas por agradecimiento es muy de Dios», ha afirmado el arzobispo de Madrid, por lo que «damos gracias a las personas que están en nuestro camino, conduciendo y sembrando con su vida alrededor. Gracias, don Carlos, por lo que ha sembrado y siembra en todo lo que dice y lo que hace», ha añadido. El cardenal Cobo ha querido recordar «las ojeras y la dedicación incansable» que desplegó Osoro al frente de la diócesis, algo «de lo que hemos aprendido los que hemos estado cerca».
Ahora, «a los demás nos queda la tarea de reconocer que, si estamos aquí, es porque otros como usted han sembrado antes con su lucha, su esfuerzo y su corazón», ha dicho el cardenal Cobo. Ha valorado asimismo «el servicio de la cercanía desde la oración» del arzobispo emérito.
Por su parte, Osoro ha dado las gracias a la Universidad Eclesiástica San Dámaso y a toda la archidiócesis de Madrid «porque siempre me he sentido muy querido», en una labor «en la que entregado todo lo que sabía y todo lo que podía. Puedo decir que no tengo conciencia de haberme reservado nada».
Purificación y maduración
En el acto ha intervenido también el cardenal Ricardo Blázquez Pérez, arzobispo emérito de Valladolid y compañero de Carlos Osoro varios años al frente de la Conferencia Episcopal, donde fueron presidente y vicepresidente respectivamente. Así, ha compartido «el reconocimiento que debemos muchos a don Carlos y su dedicación generosa y sacrificada a la iglesia en Madrid, en España y en el mundo».
Ante numerosos obispos y sacerdotes, Blázquez ha querido mencionar «el cansancio del clero y de la Iglesia» en general en la actualidad, incluidos «los matrimonios cristianos», todos afectados por «el ensombrecimiento de Dios en nuestra vida». En este sentido, ha hablado de «pequeñez» y de «números reducidos», por lo que «tenemos que plantearnos en nuestra evangelización la cuestión fundamental de Dios y de la vida eterna».
«Demos gracias a Dios por esta situación», ha dicho sin embargo Blázquez, porque «estos cambios tan rápidos y profundos en la sociedad ponen en cuestión cosas que estaban asentadas pacíficamente, y son una llamada a la purificación y a la maduración, para redescubrir lo fundamental y nuclear de nuestra fe». De ahí que, «aunque no estemos para muchos cohetes, tenemos por delante la preciosa labor de transmitir la fe y de acompañarnos unos a otros», concluyó.
«He sido muy feliz en San Dámaso», ha reconocido durante el acto el cardenal Carlos Osoro. «Creo que me he leído todos los escritos que han salido de aquí». El arzobispo emérito de Madrid y gran canciller de la universidad entre 2014 y 2023 ha destacado asimismo «la formación seria, serena y profunda que reciben sacerdotes y laicos», mientras que el rector de la universidad, Javier Prades, ha valorado en don Carlos «su presencia y actividad entre nosotros durante estos casi diez años», un periodo «de consolidación y de asentamiento» de la universidad.
Prades ha recordado también el impulso de Osoro al proyecto de construcción de la biblioteca de San Dámaso y ha destacado que bajo su amparo «se ha consolidado un servicio de acogida a sacerdotes extranjeros enviados por sus obispos a formarse en la universidad, cerca de 90 cada año».