Irak planta la esperanza del retorno de los cristianos con la apertura de la iglesia de Abraham - Alfa y Omega

Irak planta la esperanza del retorno de los cristianos con la apertura de la iglesia de Abraham

El terrorismo yihadista vació Irak de cristianos, pero la construcción de esta iglesia allana el camino de su regreso

Victoria Isabel Cardiel C.
Iglesia Ibrahim Al-Khalil, que fue construida en un esfuerzo por atraer turistas y cristianos a la ciudad antigua, después de la visita del Papa a Ur en 2021, en marzo de 2024
Iglesia Ibrahim Al-Khalil, que fue construida en un esfuerzo por atraer turistas y cristianos a la ciudad antigua, después de la visita del Papa a Ur en 2021, en marzo de 2024. Foto: Reuters / Forqan Salam.

En junio de 2014, los terroristas del autoproclamado Estado Islámico (EI) conquistaron Mosul y amenazaron con decapitar a las familias cristianas si no se convertían al islam o si no accedían a pagar un impuesto especial para no musulmanes. Muchos huyeron en una estampida dramática que diez años después ve signos de recuperación. Por ejemplo, la apertura de la iglesia de Ibrahim Al-Khalil, la «iglesia de Abraham», el profeta que según la tradición unió el destino de las tres grandes religiones monoteístas, en Ur de los caldeos, donde en marzo del 2021 el Papa invocó su figura para recoser las heridas infringidas.

En la fiesta de Pascua se celebrará la primera misa con la que quedará inaugurada la iglesia. Un símbolo de esperanza con el que se intentará dar un impulso a las peregrinaciones hasta la antigua ciudad sumeria que mandó construir el rey Ur-Nammu hace más de 4.000 años y cimentar el camino regreso de los cristianos a Irak.

La construcción de la iglesia de Abraham está a punto de terminar y forma parte de un complejo mucho mayor que se levanta en la llanura desértica y se distingue por su característica forma piramidal o zigurat.

Según informa AsiaNews, a principios de marzo se instaló en la torre una gran campana de arcilla brillante. La iglesia quiere ser un símbolo del diálogo interreligioso, pero también un estímulo para la comunidad cristiana iraquí diezmada en los últimos veinte años, que en el pasado contaba con cerca de 1,5 millones de fieles de los que hoy apenas quedan unos cientos de miles.

El ingeniero cristiano Adour Ftouhi Boutros Katelma, de 79 años, originario de Mosul aunque reside en Bagdad, es el cerebro que orquestó su construcción: «Ur es un lugar santo porque aquí nació el profeta —explica en declaraciones a AsiaNews— y porque él nos remite a Dios. Abraham es el padre de todos los profetas, es el origen común de cristianos, judíos y musulmanes. Y es también el lugar donde nació una de las primeras civilizaciones y donde comenzaron muchas ciencias como las matemáticas, la física e incluso la música. Después de la visita del Papa pensamos construir una iglesia porque es el lugar de nacimiento de Abraham y porque queríamos hacer un edificio que mostrara al mundo nuestra identidad».

La visita del Papa a Irak supuso un valiente mensaje de esperanza y una clara invitación a seguir el camino del diálogo interreligioso. Francisco presidió en el lugar donde han construido la iglesia un encuentro con un centenar de representantes religiosos iraquíes, entre chiíes, suníes, zoroastrianos y yazidíes.

La «iglesia de Abraham» no es sólo un lugar de culto, sino que al mismo tiempo es «un centro religioso, social y cultural estrechamente vinculado a Francisco y su mensaje sobre la pertenencia común de los fieles al profeta de las tres grandes religiones monoteístas», asegura Boutros Katelma.

«Es asimismo un paso más en el diálogo interreligioso tras la firma del documento sobre “fraternidad” en Abu Dabi en 2019 con el gran imán de Al Azhar del Islam sunita y el encuentro, también en Irak, con el gran ayatolá Ali al Sistani, la máxima autoridad chiita en el país», incide.

El complejo tiene forma de círculo que encierra la historia y está orientado hacia el este; las tres partes que lo componen simbolizan la trinidad, y se accede al interior a través de una gran escalinata, como un zigurat, según un modelo inspirado en la trascendencia, la elevación y la búsqueda de la pureza hacia lo alto. Para la construcción se utilizó una piedra de color blanco, símbolo de pureza, para reforzar el mensaje de espiritualidad.

Con la iglesia de Ur, explica el ingeniero caldeo, «queríamos recordar que los cristianos son originarios de Irak, hacer lo posible para que puedan regresar y descubrir su tierra, su pasado, sus raíces». «Hoy Irak es un país que casi se ha vaciado de su componente cristiano, pero hay muchas oportunidades, especialmente en términos de empresas, de negocios y de desarrollo, sobre todo de infraestructuras, porque muchas se destruyeron con la guerra. Aquí se puede construir y hacer negocios, mientras que desde un punto de vista social debemos trabajar para lograr un entendimiento recíproco, es el momento adecuado para reconstruir», detalla.

La iglesia de Abraham no estará sólo al servicio de la comunidad cristiana local, sino que también quiere atraer a turistas de todo el mundo, particularmente a los peregrinos cristianos.

En este sentido, Shamil al-Rumaidh, director de Antigüedades de la provincia de Dhi Qar, donde se encuentra la antigua ciudad de Ur, señala que «la visita del Papa tuvo una importancia histórica» para revitalizar el conocimiento de la región. Y esta iglesia también constituye uno de los principales atractivos turísticos de Irak, porque se encuentra «cerca de los yacimientos arqueológicos de Ur» y de esa manera permite «conocer y descubrir el pasado y al mismo tiempo rezar en un templo donde está vivo el presente, la actualidad y la presencia del pontífice. La estructura también contará con una útil sala de reuniones destinada especialmente a acoger a los peregrinos cristianos que visitan la tierra de Abraham, y ha sido posible gracias al compromiso personal del ingeniero caldeo que supervisó el proyecto y puso a disposición los fondos necesarios para construirlo».

La iglesia de Ibrahim será también un mensaje de paz para todas las religiones.