Gentes: José Ignacio Munilla, obispo de San Sebastián (en www.unav.edu) - Alfa y Omega

Primero es el ser, y luego es el comunicar. No pretendamos que la comunicación nazca de una técnica, que sea algo artificial. Nos tenemos que preocupar mucho más por el contenido que por la expresión del contenido, y la clave para eso reside en que estemos enamorados del mensaje que queremos transmitir. Quien está enamorado del mensaje que va a transmitir recibe un cierto carisma, como el Papa Francisco lo ha recibido, para poder comunicar.