García Magán: «Sin ley, la alternativa es la tiranía»
El secretario general de la Conferencia Episcopal Española pide en una entrevista sobre la actualidad política española «respetar escrupulosamente la autonomía del poder judicial»
«Si no respetamos el imperio de la ley, la alternativa al Estado de derecho es la tiranía, sea de derechas o de izquierdas», ha manifestado este martes el secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), César García Magán, durante una entrevista concedida a Europa Press. Hay que «respetar escrupulosamente la autonomía del poder judicial y la libertad de los jueces, porque es uno de los principios fundamentales de la democracia», ha afirmado en referencia a la ley de amnistía.
«Cuando hay poderes que invaden las competencias de otro poder, el edificio democrático se tambalea y hay el riesgo de caer en una autocracia», ha precisado García Magán. Al mismo tiempo ha advertido de que «en los países donde los jueces pierden libertad», se observan «experimentos sociopolíticos». En esta línea, el secretario general de los obispos también ha recordado un reciente comunicado de la conferencia episcopal llamando «a un diálogo social y a evitar posiciones inflexivas y excluyentes», pues «todo había de hacerse dentro del respeto a las leyes y al ordenamiento jurídico del Estado».
Sobre si le preocupa en concreto que el Gobierno haya cambiado de opinión en este asunto, pasando de decir que la amnistía era algo inconstitucional a lo contrario, García Magán ha precisado que «el Gobierno dice lo que dice» y «los ciudadanos tienen derecho a tener su opinión y tienen derecho a sacar sus conclusiones».
Así, el secretario general de los obispos ha dicho que «habrá que ver cuáles eran los compromisos del partido del Gobierno y ahora la razón de ese cambio de posición». A su juicio, «las instituciones tienen que buscar el bien común y la integración». En este tema, según ha advertido, «aún hay muchas heridas abiertas de un pasado todavía relativamente reciente».
Preguntado por un reciente fallo de la justicia de la Unión Europea que avala que una administración pública pueda prohibir a sus empleados el uso visible de símbolos religiosos, García Magán ha defendido «el derecho fundamental de libertad religiosa», y ha puntualizado que este «no se limita solamente a que uno en la iglesia, en la mezquita o en la sinagoga pueda ir a rezar», sino que también garantiza «el derecho a estar en la plaza pública». Por ello ha insistido en el derecho «a la presencia de signos religiosos» y a «expresarse en la calle siempre que se cumpla con el orden público».