Francisco en la audiencia: «Ganar dinero con la muerte es terrible»
En su primera catequesis del mes mariano, el Papa ha hablado de la fe como «un don pequeño pero esencial». También ha lamentado la rentabilidad de las inversiones en la industria armamentística
Durante la audiencia general de este miércoles, el Papa Francisco ha recordado una vez más a los afectados por las guerras en Ucrania, Palestina, Israel, o los rohinyás de Myanmar, pidiendo «la paz verdadera» para todos los conflictos que aún siguen vigentes en el mundo. En este sentido, el Pontífice ha afirmado que «la guerra es siempre una derrota» y ha lamentado que la industria armamentística se lucre de las muertes de los civiles en las guerras. «Hoy, las inversiones que dan más ingresos son las fábricas de armas. Ganar dinero con la muerte es terrible», ha dicho.
Ya en la catequesis habitual, Francisco ha querido reflexionar sobre la fe, que ha definido como «el acto por el cual el ser humano se entrega libremente a Dios». Ha puesto como ejemplo la figura de Moisés, que incluso cuando le asaltaban las dudas «aceptó la voz de Dios y permaneció firme confiando en el Señor e incluso defendiendo al pueblo que tantas veces carecía de fe». Además, y como inicio de este mes mariano, también ha señalado a la Virgen María como una «mujer de fe» al recibir «el anuncio del Ángel que muchos habrían desechado por demasiado exigente y arriesgado».
«La fe es la virtud que hace al cristiano. Porque ser cristiano no es ante todo aceptar una cultura, con los valores que la acompañan, sino acoger y custodiar un vínculo: Dios y yo, mi persona y el rostro amable de Jesús. Este vínculo es lo que nos hace cristianos», ha añadido.
Dentro del último ciclo de sus catequesis, el Papa ha hablado de la fe al ser una de las tres virtudes teologales. Sin ellas «podríamos ser prudentes, justos, fuertes y templados, pero no tendríamos ojos que ven incluso en la oscuridad, no tendríamos un corazón que ama incluso cuando no es amado, no tendríamos una esperanza que osa contra toda esperanza».
Francisco ha explicado que «la fe es el primer don que hay que acoger en la vida cristiana». Y ha subrayado que su gran enemigo es el miedo y no la razón ni la inteligencia «como algunos siguen repitiendo obsesivamente». «Aparentemente es un don pequeño, pero es el esencial», ha dicho. De igual manera, ha afirmado que para un padre cristiano esto es lo que debe pedir para su hijo, como se hace en el Bautismo, porque con la fe, «un padre sabe que, incluso en medio de las pruebas de la vida, su hijo no se ahogará en el miedo».
El Santo Padre también ha tenido momentos para manifestar su cercanía a los habitantes de Kenia, afectados por las graves inundaciones que azotaron el pasado lunes la región del Gran Valle del Rift, en Kenia. El número de muertos asciende a 169 personas, con más de 190.000 damnificados. Cruz Roja ha informado de que 109 han sido hospitalizadas. «Los invito a rezar por todos aquellos que están sufriendo los efectos de este desastre natural» dijo el Papa. «Incluso en medio de la adversidad, recordemos la alegría de Cristo resucitado».