Francisco ya está en Portugal: «Volveré rejuvenecido»
Sobrevolando España, ha hecho llegar un telegrama al rey Felipe VI asegurando sus oraciones por nuestro país para que Dios le conceda serenidad
El Pastor One, el avión del Papa Francisco, ha llegado con unos minutos de adelanto a la base aérea de Figo Maduro en Lisboa. A pie de pista, Francisco ha sido recibido por las autoridades civiles, encabezadas por el presidente del país, y las religiosas, y enseguida se ha dirigido al Palácio Nacional de Belém para la ceremonia de bienvenida y su reunión con Marcelo Rebelo de Sousa.
Esta mañana, como es habitual antes de cada viaje apostólico, el Pontífice ha recibido invitados en Casa Santa Marta. Eran unas quince personas, entre ellos, algunos jóvenes que están recibiendo terapia en comunidades de rehabilitación y que, por tanto, no pueden participar en la JMJ. También había tres abuelos con sus nietos que personificaban el deseo del Papa de que en esta JMJ estuvieran de alguna manera presentes también los abuelos. En un mensaje previo a esta cita de Lisboa, el Santo Padre había pedido a los jóvenes que visitaran a sus abuelos o a algún anciano solo antes de viajar a Portugal.
En el avión papal, la corresponsal de COPE, Eva Fernández, ha hecho entrega al Papa de una carta de Pablo, el joven carmelita descalzo que murió con solo 21 años víctima de un sarcoma de Ewin y cuya historia contamos en Alfa y Omega. En la misiva, Pablo cuenta a Francisco que le hubiera encantado vivir la JMJ, porque es consciente de que quizá para entonces «Dios, en su infinita misericordia, me habrá llamado ya». «En ese caso, espero que Él me permita echarte una mano, y tanto mejor, desde el Cielo, haciendo lío y celebrando, como bien dices», prosigue el mensaje. Junto a la carta, Eva Fernández también ha entregado al Papa el recordatorio del funeral del joven que él mismo diseño y representa el árbol de la vida.
Precisamente en su saludo a los periodistas a bordo del vuelo papal, el Papa, con buen humor, aseguró que volverá «rejuvenecido» de esta 37º JMJ y recordó que esta es ya la cuarta a que acude. Por eso, «sigamos haciendo ruido», concluyó.
Como es habitual, al sobrevolar varios países el Pontífice envía telegramas de cortesía a cada jefe de Estado. Al pasar por nuestro país ha enviado uno al rey Felipe VI en el que saluda a su familia, le asegura sus oraciones por España e invoca la bendición de Dios para nuestro país, para que goce de «serenidad».