Francisco visita a 250 niños hijos de empleados del Vaticano y los invita a «ser héroes»
Estate Ragazzi in Vaticano es un campamento urbano para niños de entre 5 y 13 años nacido en pandemia para ofrecer una alternativa de ocio a los menores que pasaron meses en confinamiento
Francisco sorprendió la mañana del martes a los 250 niños de entre 5 y 13 años reunidos en Estate Ragazzi in Vaticano, el campamento de verano organizado para hijos de empleados del Vaticano en el Aula Pablo VI. Nada más llegar saludó a los animadores y les pidió «conservar la inquietud que mueve a servir a los demás».
El Papa charló con los niños y los invitó a ser agradecidos con sus padres y a valorar a sus abuelos, a quienes definió como «superhéroes» con el valor de «formar una familia y que tienen sabiduría». Después recibió regalos y dibujos, como un cartel que le daba las gracias diciendo «Usted nos ayuda a ser héroes». También una medalla de cartón en la que estaba escrita la palabra «héroe» que Francisco se colgó.
Con una abeja como mascota y el lema Bee Heroes (un juego de palabras en inglés con la mascota que podría traducirse como Sed héroes) esta edición de Estate Ragazzi in Vaticano ha girado en torno a la heroicidad, un valor que los niños aceptaron con mucha alegría. Este campamento urbano nació durante la pandemia para ofrecer una alternativa de ocio a los niños que pasaron meses confinados. Está coordinado por el salesiano Franco Fontana, quien organiza las actividades físicas, educativas y espirituales. Es además director de los salesianos en el Vaticano y capellán de los Museos Vaticanos.
El domingo pasado el Papa ya hizo referencia después del ángelus a este campamento, al que definió como una actividad «muy apreciada».