Francisco abraza a niños heridos de guerra en Ucrania o Palestina - Alfa y Omega

Francisco abraza a niños heridos de guerra en Ucrania o Palestina

Antes del encuentro en el Estadio Olímpico de Roma con motivo de la Jornada Mundial de los Niños, el Papa ha conocido las historias de estos pequeños

Ángeles Conde Mir
El Papa ha recibido la visita de un grupo de niños palestinos, ucranianos e indonesios heridos de guerra o con importantes secuelas psicológicas. Francisco saluda a Roman Oleksiv
El Papa ha recibido la visita de un grupo de niños palestinos, ucranianos e indonesios heridos de guerra o con importantes secuelas psicológicas. Francisco saluda a Roman Oleksiv. Foto: CNS photo / Vatican Media.

El Papa ha recibido este sábado a un grupo de niños procedentes de Ucrania, Bielorrusia, Palestina e Indonesia. Se trata de niños que han resultado heridos en el marco de conflictos armados. Presentan heridas físicas visibles, como amputaciones y quemaduras, pero sobre todo heridas psicológicas cuya curación es igual de difícil. Los pequeños también han estado acompañados por alguno de los médicos que les han salvado la vida. Francisco ha querido reunirse con todos ellos antes del encuentro de este sábado con los niños en el Estadio Olímpico de Roma con motivo de la Jornada Mundial de los Niños.

El grupo ha llegado de la mano de la Fundación 5P Global, una entidad de origen indonesio que, a través del proyecto 5P Kids, ayuda en Europa a los niños afectados por el conflicto en Ucrania y en Oriente Medio. Además de los heridos de guerra, se ocupan de huérfanos y combaten la pornografía y la explotación infantil.

5P Global ha patrocinado la Jornada Mundial de los Niños y ha participado en el evento con este grupo de pequeños que han tenido ocasión de encontrarse con Francisco antes del evento en el Olímpico de la Ciudad Eterna.

«El Santo Padre nos saludó con una gran sonrisa y gran alegría, como un verdadero abuelo abrazando a sus nietos», ha contado el sacerdote Marcin Schmidt, secretario general de esta fundación, a los medios vaticanos. Ha ido presentando al Papa a los niños y sus historias. En un momento dado, Francisco no ha podido reprimir un «terrible» al escucharlas.

Varios de los niños están severamente mutilados o heridos y han perdido a parte de sus familias. Es el caso de Roman Oleksiv, de 10 años. En julio de 2022, un misil de crucero ruso alcanzó su ciudad, Vinnystsia, y mató a 28 personas. Una era su madre. Él quedó gravemente herido, con un brazo roto, metralla en la cabeza y quemaduras en más del 45 % de su cuerpo. Después de que los médicos de Leópolis lo estabilizaran, fue enviado a una unidad especializada en quemados en Dresde (Alemania), donde pasó casi un año. Ha sido operado más de 33 veces.