El día de Reyes Magos, o Epifanía a los Magos de Oriente, es una de las fiestas litúrgicas más antiguas, más aún que la misma Navidad. Comenzó a celebrarse en Oriente en el siglo III y en Occidente se la adoptó en el curso del IV. Epifanía, voz griega que a veces se ha usado como nombre de persona, significa «manifestación», pues el Señor se reveló a los paganos en la persona de los magos.
No obstante, la Iglesia celebra como Epifanías tres manifestaciones de la vida de Jesús: la Epifanía ante los magos de oriente (manifestación a los paganos), Epifanía del Bautismo del Señor (manifestación a los judíos) y la Epifanía de las bodas de Caná (manifestación a sus discípulos).
En la Edad Media la Epifanía poco a poco pasó a conocerse más como la fiesta de los Reyes Magos. Actualmente la Iglesia Católica celebra las tres epifanías en diferentes tiempos del calendario litúrgico.
El hacer regalos a los niños el día 6 de enero corresponde a la conmemoración de la generosidad que estos magos tuvieron al adorar al Niño Jesús y hacerle regalos tomando en cuenta que «lo que hiciereis con uno de estos pequeños, a mi me lo hacéis» (Mt. 25, 40); a los niños haciéndoles vivir hermosa y delicadamente la fantasía del acontecimiento y a los mayores como muestra de amor y fe a Cristo recién nacido.
Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos diciendo: «¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle», cuenta San Mateo en la Biblia. El evangelista continúa con el relato: «Al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra». Pero, ¿por qué esos regalos? ¿Cuales son sus significados?
- Oro: El oro es un símbolo de la realeza. el oro es un presente regio, que se destinaba a monarcas y altos dignatarios. En el relato, Mateo plasma que los magos preguntaron directamente por el Rey de los judíos.
- Incienso: Es el resultado de la suma de resinas aromáticas vegetales y aceites esenciales que al quemarse desprenden un humo perfumado. El incienso nos remite a la divinidad. Jesús no es sólo un hombre; es el Hijo de Dios hecho hombre. Los Magos «veían a un hombre, pero reconocían a Dios», escribe el Pseudo-Crisóstomo. No se escandalizan de su pequeñez, de su debilidad, de su limitación. Ven en el Niño a Dios.
- Mirra: Se trata de una resina que segrega la Commiphora myrrha, un árbol que crece al noreste de África, en Arabia y Turquía. La mirra es aromática y contiene varias propiedades medicinales, aunque también se utilizaba tradicionalmente como ungüento para embalsamar a los muertos. Jesús «había de morir por la salvación de todos», comenta San Agustín. Se trata, pues, de un signo de la humanidad del Señor, que no dudó en compartir nuestra condición humilde y abocada a la muerte.
¡¡Feliz día de Reyes!!