Exdirector de Foessa: «La vivienda que tú alquilas es la casa de otros» - Alfa y Omega

Exdirector de Foessa: «La vivienda que tú alquilas es la casa de otros»

José Manuel López, actual jefe de Gabinete de la ministra de Sanidad, aboga en su libro Casas (editorial Akal) por un cambio conceptual que permita «pensar otras políticas»

José Calderero de Aldecoa
José Manuel López
El autor es ingeniero especializado en planificación y urbanismo. Foto cedida por José Manuel López.

—En el libro aboga por un cambio conceptual. Habla de casas, no de viviendas. ¿Por qué?
—Sí, porque si no cambiamos la mirada, no vamos a cambiar de políticas. La política que nos ha traído hasta aquí no es la que nos va a sacar de donde estamos. Con esto claro, hay dos grandes líneas. En primer lugar, hay quien dice: «Hagamos muchas más casas». Y eso está bien. Pero tú tienes el músculo económico que tienes. En este momento en nuestro país solo se hacen 110.000 casas al año. Vamos, que no puedes hacer lo que quieras, sino lo que puedas. La otra opción es pensar de otra manera. Le pongo un ejemplo. En los los últimos diez años se pasó de hablar de empleo a hablar de trabajo, y eso ha cambiado las dinámicas. Se pasó de hablar de medio ambiente a hablar de transición ecológica, y eso también ha logrado que se hagan otro tipo de políticas. Ahora propongo que hagamos lo mismo con el tema de las casas. Hay que pasar de hablar de viviendas, que son ladrillos, a hablar de casas. La casa es central en los proyectos vitales. Cuando invitas a alguien a cenar, lo invitas a casa, no a tu vivienda. En las casas se vive, las viviendas se alquilan. Pero no podemos olvidar nunca que la vivienda que tú alquilas es la casa de otros. Entonces, en la medida que nosotros somos capaces de cambiar el marco conceptual, somos capaces de pensar otras políticas.

—Usted ha pasado del sector privado al público. ¿Cuáles son esas otras políticas que propone?
—Hay que generar un movimiento por el cual tú pones a funcionar las cuestiones privadas con una dinámica pública de cuidados. Lo que ocurre es que la estructura de ahora de nuestro país tiene que ver con las casas. Desde los años 60, la sociedad española ahorra en ladrillo. Si miras el análisis del ahorro de los hogares —que se sitúa en los dos billones de euros aproximadamente— el 70 % está metido en las viviendas. El problema es que, en el futuro, la mitad de los hogares van a estar sostenidos con un solo sueldo. El INE ha hecho una perspectiva de crecimiento de la población en España a través de los hogares. Ahora mismo estamos en 19,3 millones de hogares y en el año 2039, o sea en 14 años, vamos a estar en 23 millones. De todos ellos, lo que dice el INE es que un tercio van a ser unipersonales, otro tercio estará formado por dos personas —no necesariamente dos adultos—. Hay una parte importante que van a ser familias monomarentales / monoparentales— y solo un tercio de los hogares estarán compuestos por la familia como la conocemos tradicionalmente. Es decir, mucha gente metiendo sus ahorros en la vivienda y muchas otras personas buscando casas que mantener con un solo sueldo. No hay punto de conexión. En este sentido, creo que sería interesante volver al sistema de transferencias que tuvo España años atrás: Franco se puso a hacer casas y en ese momento estaba muy controlada su transacción. Eran VPO, viviendas de protección oficial. Lo ideal ahora sería hacer viviendas VPO de forma permanente. Otra propuesta sería montar una agencia pública del alquiler. Se podría ayudar a los propietarios a alquilar, pero con un criterio público. Habría también que hablar de la estabilización de precios. Que se saque un índice que determine el rango de actuación. Y antes hablábamos del tema de la limitación en la construcción de viviendas; pero una propuesta realista es que se permita ampliar la altura de los edificios existentes.

—El Observatorio de Economía de la Universidad Francisco de Vitoria ha propuesto lo mismo. ¿Puede ahondar en esta idea que pone de acuerdo a expertos de distintas sensibilidades?
—Antes hablábamos de 110.000 casas en construcción. Pero otra forma de conseguir casas es aumentar la altura de los edificios. Con el nuevo sistema de construcción industrial es posible. La idea sería colocar un entramado ligero encima de los edificios. Bastaría con que permitieras subir una planta a todos los edificios que tienen que ser rehabilitados. La condición es que lo que se gana con la plusvalía de esa nueva casa se invierta en la rehabilitación del propio edificio. Al final el beneficio es doble, porque estás aumentando el parque de vivienda y estás ahorrando un coste a los vecinos, que sin esta medida tendrían que desembolsar de sus recursos los fondos para la rehabilitación del edificio.