España se une al Papa para pedir por el fin de la pandemia

El lunes se clausurará en los Jardines Vaticanos el maratón de oración convocado por el Papa Francisco para pedir por el fin de la pandemia. Una iniciativa que ha tenido como sedes a 31 santuarios de todo el mundo –uno cada día de mayo–, desde los que se ha rezado el rosario pidiendo por esta intención. Hasta entonces, el maratón visitará este jueves el santuario de la Madre de Dios, en Zarvanytsia (Ucrania); el viernes el santuario Madonna Negra, en Altötting (Alemania); el sábado el de Nuestra Señora del Líbano, en Harissa (Líbano), y el domingo el santuario de Nuestra Señora del Santo Rosario, en Pompeya (Italia). Todos ellos se podrán seguir a través del canal de YouTube de Vatican News.

El santuario de Montserrat fue uno de los elegidos por el Vaticano –el único español–, aunque posteriormente otros templos de nuestra geografía, como la basílica del Pilar, se han querido sumar al maratón. «Aquí habitualmente rezamos el rosario tres veces al día pidiendo por las intenciones del Papa y de toda la Iglesia», explica Manuel Amor Moliner, canónigo del Cabildo Metropolitano de Zaragoza. Y «ahora que el Papa nos ha pedido rezar para que se acabe la COVID-19 nos pareció importante sumarnos al maratón», añade. Lo hicieron el pasado lunes, 24 de mayo.

Lo mismo ocurrió en el santuario de Montserrat, que presencialmente contó con 250 personas –el máximo permitido dentro del templo por las autoridades catalanas–,aunque a través de la página web se sumaron más de 19.000 fieles. «El acto comenzó con una oración inicial del abad de Montserrat, el padre Josep María Soler. Después se rezaron los misterios gozosos, intercalando la lectura de unos textos preparados para la reflexión. Se concluyó con unas palabras finales de despedida y se empalmó con el oficio de vísperas de la comunidad benedictina», detalla Óscar Bardají, director de Comunicación de la abadía de Montserrat.

La celebración contó también con la intervención de la Escolanía de Montserrat, que es una de los coros de niños cantores más antiguo de Europa y que en la actualidad cuenta con 48 integrantes. «Ha sido una iniciativa sencilla, pero con una gran hondura espiritual. Nos hemos puesto a rezar por el fin de la pandemia y esperamos que nuestras súplicas sean escuchadas», concluye Óscar Bardají.