En una televisión saturada de discursos frívolos, que exaltan a los narcisos contemporáneos, enamorados de su propia imagen, supone todo un oasis encontrar un programa que ponga en práctica la que el Papa Francisco denomina «cultura del encuentro», para escuchar y enriquecerse con lo que tiene que decir el que no necesariamente piensa como tú. Por eso hay que marcar en la agenda los Encuentros para una nueva era que ha estrenado recientemente TRECE y que, coproducidos con la Fundación Pablo VI, se emiten cada viernes a las 22:00 horas.
Los encuentros recogen los foros realizados por la propia fundación, están presentados por Jesús Avezuela, el director de la Pablo VI, y cuentan con personalidades relevantes del mundo de la educación, la ciencia o la cultura, gente que se junta no para hablar de todo, sino sabiendo muy bien de lo que habla, para pensar juntos las preguntas y las posibles respuestas, tan inciertas como apasionantes, con las que nos asalta el tiempo que nos ha tocado vivir: ¿Será verdad que todo va a salir bien y que saldremos reforzados de esta pandemia?, ¿vamos a ser sustituidos por máquinas o se generarán nuevos empleos?, ¿no nos estaremos enredando en las redes hasta convertirnos en personas a una pantalla pegadas?
Desde el pasado 12 de febrero, y durante 13 semanas seguidas, podemos sumarnos a este foro y disfrutar de un formato televisivo que a algunos les recordará a la mítica Clave de Balbín y que se enriquece estirando la programación con los Encuentros de cine, una selección de grandes títulos recientes, directamente relacionados con el tema que se acaba de tratar en el foro de debate y que nos permite rematar el viernes con una película de calidad, recuperar la fe en la que llamábamos caja tonta y darnos cuenta, al fin, de que, tal vez, la tonta no fuera exactamente la caja a la que estábamos mirando.