El viaje del Papa a África hace un año: «Nos sentimos orgullosos» - Alfa y Omega

El viaje del Papa a África hace un año: «Nos sentimos orgullosos»

Del 4 al 10 de septiembre de 2019 el Papa visitaba Mozambique, Madagascar y Mauricio. Doce meses después, la pandemia y un desastre ecológico desafían a las poblaciones de esos tres países que están siempre en el corazón de Francisco

Redacción
Foto: CNS

Ha transcurrido un año ya del 31º viaje apostólico del Papa Francisco a Mozambique, Madagascar y Mauricio. La esperanza y la paz fueron el común denominador de los lemas elegidos para las visitas que el Pontífice realizó a estos tres países. Doce meses después, los acontecimientos actuales los han puesto fuertemente a prueba. La gran isla de Madagascar lucha contra la pandemia y la pobreza, Mauricio se enfrenta a un desastre ambiental de gran trascendencia y Mozambique afronta diariamente la inestabilidad política.

Pero en este estado africano, la población sigue sacando fuerzas del encuentro con el Papa. El padre Bernardo Suate, mozambiqueño y corresponsal de Radio Vaticano durante la primera etapa de aquel viaje apostólico, es testigo de esto. «Inolvidable», es la palabra que repite varias veces en una entrevista en la que explica el valor de la cercanía del Pontífice al pueblo de Mozambique y a la Iglesia.

«La Iglesia tiene los ojos puestos en nosotros»

El padre Suate cita una reciente carta pastoral que los obispos escribieron precisamente para conmemorar el primer aniversario de Francisco en Mozambique. En ella destacan cómo el Papa, con su presencia, vino a fortalecer su fe. «Y esto es realmente cierto, porque la Iglesia no ha tenido momentos fáciles y no los tiene ni siquiera ahora».

«Ver al Papa allí, precisamente en Mozambique, que está tan lejos en la periferia, ha hecho que los cristianos nos sintamos positivamente orgullosos». Y destaca que ciertamente están en dificultades, «tenemos que enfrentarnos a muchos desafíos —dice— y tenemos muchos problemas, pero no estamos solos. Hoy en día, la Iglesia católica universal tiene sus ojos puestos en nosotros aquí. Había este sentimiento, y esto es realmente hermoso, esto es lo que yo llamo “fortalecer la fe”. El Papa hace esto y dice “sigue adelante”. Esto es lo que necesitamos».

Sigue el contacto

Después de su visita, vivida como un momento de esperanza, el Santo Padre ha mantenido su cercanía espiritual al país. Así se hizo patente en la bendición urbi et orbe del Domingo de Pascua, 12 de abril, cuando mencionó los ataques. Esto fue percibido como una señal de que los mozambiqueños siguen en su corazón.

Más recientemente, el 21 de agosto, llamó por teléfono al obispo de Pemba, monseñor Fernando Lisboa. «Me dio mucho consuelo y tranquilidad», comentó él mismo a Vatican News. En la llamada, el Santo Padre «dijo que sigue los acontecimientos de nuestra provincia con gran preocupación y que reza constantemente por nosotros. También me dijo que, si hay algo más que pueda hacer, no debemos dudar en preguntarle».

El obispo, agradecido, le contó que desde al hablar del país en Pascua «otras personas se enteraran de nuestra situación. Vemos que varias congregaciones, algunas organizaciones (humanitarias), muchas personas están empezando a colaborar. Le dije: “Santo Padre, ha puesto a Cabo Delgado en el mapa del mundo”». «¡Qué hermoso!», fue la respuesta del Papa en italiano.

«¡Adelante!»

Monseñor Lisboa puso al Pontífice al día de la situación, sobre todo en lo relativo a la ciudad portuaria de Mocimboa da Praia, «que fue tomada por los yihadistas. No tenemos más noticias de dos de nuestras monjas en esa ciudad, dos hermanas de la Congregación Internacional de las Hermanas de San José de Chambéry».

Francisco, después de compartir su tristeza y prometer sus oraciones, le animó a contactar con el Dicasterio para la Promoción del Desarrollo Humano Integral, para poner en marcha algún proyecto de asistencia humanitaria. «¡Adelante, entonces, y mantén la fe firme!», se despidió el Pontífice.

Vatican News / Redacción