El Vaticano crea una fundación para evitar la venta de hospitales católicos
La Fundación para la Sanidad Católica saneará la economía de algunas entidades para que su atención no deje de ser accesible para todos
El Papa Francisco ha creado la Fundación para la Sanidad Católica, un organismo que «ofrecerá apoyo económico a las estructuras sanitarias de la Iglesia». En el quirógrafo firmado por el Santo Padre y hecho público este miércoles, informa Vatican News, se explica que el objetivo es «que se conserve el carisma de los fundadores, la inclusión en la red de estructuras análogas y benéficas de la Iglesia y, por tanto, su finalidad exclusivamente benéfica según los dictados de la doctrina social».
El contexto de esta decisión es la crisis que afecta a diversas estructuras sanitarias gestionadas por órdenes religiosas. Debido a las dificultades económicas, a menudo se ven en la imposibilidad de seguir manteniéndolas y las ponen en venta.
La nueva fundación vaticana, escribe Francisco, es un «ente vinculado a la Santa Sede» para que «pueda operar bajo su soberana autoridad y como entidad instrumental de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), que proveerá su gobierno y todo lo necesario para su funcionamiento». Estará dirigida por Nunzio Galantino, presidente de la APSA.
Encontrar los recursos necesarios
Según los estatutos incluidos en el quirógrafo, el objetivo de la fundación es «apoyar y relanzar las estructuras sanitarias propiedad de organismos canónicos o gestionadas por ellos, encontrando, también entre benefactores privados e instituciones públicas y privadas, los recursos financieros necesarios». Para ello, podrá llevar a cabo todo tipo de operaciones permitidas por la legislación del país en el que se encuentren los centros sanitarios, desde el respeto a la doctrina social y la sostenibilidad económica.
«Trataremos de evitar el riesgo», dijo Galantino a Vatican News, «de que, aunque no lo quieran, estas estructuras contribuyan a transmitir una idea elitista de la asistencia sanitaria, reduciendo los espacios de la atención ofrecida a todos y para todos».
«No debemos perder la atención gratuita»
El pasado 11 de julio, en su primera aparición pública tras la operación intestinal, el Papa Francisco, asomado al balcón del Hospital Gemelli, dijo: «En estos días de hospitalización, he experimentado lo importante que es tener un buen servicio sanitario, accesible a todos, como hay en Italia y en otros países», y que sea «gratuito». Un bien «precioso» que «no debemos perder».
«Incluso en la Iglesia ocurre a veces», añadía, que «por una no buena gestión» estas instituciones «no van bien económicamente». Aunque el primer pensamiento entonces puede ser vender, «tu vocación como Iglesia no es tener dinero, es hacer servicio y el servicio siempre gratuito».
Además de Galantino como presidente de la fundación, el Pontífice ha nombrado a Fabio Gasperini, secretario de la APSA, como consultor de administración. El consejo de la fundación está integrado por Mariella Enoc, presidenta del Hospital Infantil Bambino Gesù; Sergio Alfieri, profesor de Cirugía General de la Universidad Católica del Sagrado Corazón, y Chiara Gibertoni, directora general del Hospital General Sant’Orsola-Malpighi. Maximino Caballero Ledo, secretario general de la Secretaría de Economía, será el revisor de cuentas.