El Sínodo estrena metodología para facilitar la agilidad de los debates
Una vigilia de oración en la Plaza de San Pedro presidida por el Papa dará el pistoletazo de salida al Sínodo de los Obispos, que inaugurará este domingo Francisco con una Misa en la Plaza de San Pedro
Todos los Padres sinodales y participantes en el Sínodo, además de las familias en general, a movimientos y asociaciones eclesiales, han sido invitados a participar en la noche de este sábado en una vigilia de oración para preparar el Sínodo de la familia.
El cardenal Lorenzo Baldisseri, secretario general del Sínodo de los Obispos, informó este viernes sobre los procedimientos que se seguirán en la Asamblea General Ordinaria del Sínodo, que lleva por lema La vocación y la misión de la familia en la Iglesia y en el mundo contemporáneo, y que se celebrará del 4 al 25 de octubre.
Esta Asamblea es la culminación del camino sinodal comenzado hace dos años, con el envío del primer cuestionario a todas las Iglesias particulares, mediante el cual fue posible esbozar el perfil de la familia en el mundo, de sus riquezas y sus desafíos. Posteriormente la Asamblea General Extraordinaria preparó una Relación Final (Relatio Synodi) que originó ulteriores cuestiones, cuyas respuestas confluyeron en el actual Instrumentum laboris. Con este texto en la mano, compuesto por la Relatio Synodi y por las aportaciones de las Iglesias particulares, los padres sinodales se disponen a comenzar su debate a la escucha de los retos de la familia, en el discernimiento de su vocación, para el anuncio de su misión.
Participantes en el Sínodo
En el Sínodo participan los Jefes de las Iglesias Orientales Católicas, los obispos elegidos por el Sínodo de los Obispos y por los Consejos de la Jerarquía de las Iglesias Orientales Católicas, los obispos elegidos por las conferencias episcopales, diez religiosos elegidos por la Unión de Superiores Generales y los jefes de los dicasterios de la Curia Romana. Además, el Papa nombra también algunos miembros, en conformidad con las normas sinodales.
270 padres sinodales participan en esta asamblea, divididos en tres categorías: 42 de oficio, 183 por elección y 45 por nombramiento papal. La procedencia por continentes es la siguiente: 54 de África, 64 de América, 36 de Asia, 107 de Europa y 9 de Oceanía.
Pertenecen a los miembros de oficio: los jefes de los 15 Sínodos de los Obispos de las Iglesias Orientales Católicas sui iuris; los jefes de los 25 dicasterios de la Curia Romana; el secretario general y el subsecretario.
Entre los 270 padres sinodales se cuentan : 74 cardenales (incluyendo 1 patriarca cardenal y 2 arzobispos mayores), 6 patriarcas, 1 arzobispo mayor, 72 arzobispos (incluyendo 3 titulares), 102 obispos (entre ellos 6 obispos auxiliares, 3 vicarios apostólicos y 1 emérito), 2 sacerdotes párrocos y 13 religiosos.
Además, tomarán parte en esta asamblea sinodal otros invitados de diferentes culturas y naciones: 24 expertos o colaboradores del secretario especial, 51 auditores y auditoras, 14 delegados fraternos. Cabe destacar que, dado que la asamblea se ocupará de la familia, se ha querido dar especial importancia a los cónyuges, padres y jefes de familia, que son en total 18 (17 entre los auditores y una entre los expertos).
«Por último —informó el cardenal Baldisseri— nos complace acoger a los Delegados Fraternos, que, como representantes de otras Iglesias y comunidades eclesiales, sin duda comparten con la Iglesia Católica la solicitud por la evangelización y la atención pastoral de las familias en el mundo actual».
Nueva metodología
En lo que respecta a la metodología del Sínodo, el secretario general especificó que, gracias a la experiencia adquirida durante la III Asamblea General Extraordinaria del pasado octubre y teniendo en cuenta varias sugerencias de diversa procedencia, sobre todo de los padres sinodales, la Secretaría General del Sínodo ha elaborado una nueva metodología para aplicar a la Asamblea General Ordinaria, que el Santo Padre aprobó en la reunión del Consejo Ordinario de la Secretaría del 25 al 26 de mayo de 2015.
Considerada la metodología de los Sínodos precedentes, la mayoría de los Padres sugirió que la Asamblea General Ordinaria fuera más dinámica y participativa a través de la distribución de las intervenciones en el aula de los miembros en un momento sucesivo, para poder dedicar más atención a la aportación de cada uno de ellos. Por otra parte, los padres sinodales solicitaron que se refuerce el trabajo en los llamados Círculos Menores, donde hay una participación más activa en la discusión y un debate más directo e inmediato entre los padres en su propio idioma, en el que eventualmente pueden intervenir los auditores y delegados fraternos.
El fruto de la primera etapa sinodal, madurado en la pasada Asamblea General Extraordinaria, ha sido la Relatio Synodi, que se ha convertido junto con una serie de preguntas anejas en los Lineamenta de la Asamblea General Ordinaria entregados a las Iglesias particulares y a todos los demás sujetos que tuvieran derecho. El Instrumentum laboris, resultado de la composición de la Relatio Synodi y de las respuestas relacionadas, es el documento base de los trabajos sinodales de esta Asamblea.
Sesión inaugural
En la sesión inaugural, el lunes 5 de octubre, el presidente delegado dirige su saludo al Santo Padre, que abre los trabajos. A continuación intervienen el secretario general y el relator general, con sus respectivas relaciones. Después, el relator general presenta los temas de la primera parte (La escucha de los retos de la familia; cf. Instrumentum laboris nº 6-36.). Después del testimonio de un matrimonio de auditores, comienzan las intervenciones de los Padres sinodales en las Congregaciones Generales, cuya contribución integra el texto de base.
Se abren después las sesiones de los Círculos Menores donde los Padres reflexionan sobre el texto base enriquecido por las aportaciones efectuadas en el Aula, con el fin de elaborar las «modos» para que el texto madure ulteriormente. Al final de las sesiones, el relator de cada Círculo presenta en el aula una breve relación del trabajo desarrollado y entrega las ‘modos’ que se incluyen en el texto base. Las relaciones de los Círculos Minores serán publicadas.
El mismo procedimiento se repite en la segunda parte (El discernimiento de la vocación de la familia; cf. Instrumentum laboris nº 37-68.) y en la tercera (La misión de la familia hoy.; Cf. Instrumentum Laboris nº 69 -147), durante las dos semanas sucesivas.
Composición de la Comisión para la elaboración de la Relación Final
La Comisión para la elaboración de la Relación Final, nombrada por el Santo Padre, donde están representados los cinco continentes, está compuesta como sigue:
Cardenal Péter Erdö, arzobispo de Esztergom-Budapest (Hungría), relator general;
monseñor Bruno Forte, arzobispo de Chieti-Vasto (Italia), secretario general;
cardenal Oswald Gracias, arzobispo de Bombay (India);
cardenal Donald William Wuerl, arzobispo de Washington (Estados Unidos);
cardenal John Atcherley Dew, arzobispo de Wellington (Nueva Zelanda);
monseñor Víctor Manuel Fernández, arzobispo titular de Tiburnia y rector de la Pontificia Universidad Católica Argentina (Argentina);
monseñor Mathieu Madega Lebouakehan, obispo de Mouila (Gabon);
monseñor Marcello Semeraro, obispo de Albano (Italia);
padre Adolfo Nicolás Pachón, SI, prepósito general de la Compañía de Jesús, en representación de la Unión de los Superiores Generales.
La comisión tiene la tarea de seguir cada etapa del proyecto; por lo tanto, se reúne al final de los trabajos, en cada una de sus partes y para la redacción final. Al final de las tres etapas de trabajo, esa Comisión supervisa la preparación del proyecto de la Relación final, que se presenta en el aula. Teniendo en cuenta que el proyecto está compuesto de tres textos que ya han recibido los modos colectivos de los círculos menores –cuyas relaciones fueron leídas en el aula y publicadas– las intervenciones posteriores deben respetar el trabajo colectivo realizado hasta el momento.
Sucesivamente, la Comisión supervisa la elaboración del texto definitivo de la Relatio finalis, que en la mañana del sábado 24 de octubre se presentará en el Aula, para ser sometida por la tarde a votación en la Asamblea.
Una vez aprobado, el documento se entregará al Papa a quien corresponde tomar las decisiones que considere oportunas al respecto.
Intervenciones breves; comunicaciones con la prensa
Dado el gran número de personas con derecho a tomar la palabra (318 entre padres, delegados fraternos y auditores) y el mayor espacio reservado a los Círculos Menores (13 sesiones), cada orador tiene la facultad de hablar en el Aula durante tres minutos e intervenir ampliamente en los Círculos. Como en el pasado, en las Congregaciones generales habrá una serie de momentos, de una hora de duración cada uno, dedicados a las intervenciones libres de los Padres. Además, siempre se pueden presentar a la Secretaría General, además de la versión en papel e informática de los textos pronunciados en el Aula, otros textos escritos,
Considerando que la comunicación con los medios y la información durante la pasada Asamblea General Extraordinaria fueron abundantes y completas, en esta Asamblea General se utiliza el mismo método. En este sentido, se tiene presente el criterio fundamental, recordado varias veces por el Santo Padre: el Sínodo debe ser un espacio protegido, para que pueda actuar el Espíritu Santo, de modo que los Padres tengan la libertad de expresarse con parresía.
Durante las tres semanas, como base de la información habrá un briefing que se ampliará con una mayor presencia de los Padres sinodales, utilizando todos los medios de comunicación disponibles. Los padres tienen la libertad de hablar con los medios de comunicación a su propia discreción y responsabilidad. Las diversas fases de elaboración del documento son reservadas, considerando que los textos, durante el proceso sinodal, están sujetos a la evolución continua hasta la redacción final. Se publicaran, en cambio, las relaciones de los Círculos Menores relativos a las tres partes de los trabajos sinodales. Una comisión especial, junto con la Oficina de Prensa, se ocupa oportunamente, como de costumbre, de la información sobre el Sínodo.
17 octubre, conmemoración del 50 aniversario del Sínodo
El cardenal Baldisseri informó además de que el sábado 17 de octubre tendrá lugar la conmemoración del 50 Aniversario del Sínodo de los Obispos en el Aula Pablo VI. El evento está abierto a todos, además de a los participantes en el Sínodo. «En la mente del beato Pablo VI, que lo instituyó el 15 de septiembre de 1965, el Sínodo debía perpetuar en la Iglesia el espíritu del Concilio Vaticano II, para que incluso después de su conclusión siguiera llegando al pueblo cristiano la gran abundancia de beneficios producidos durante el Concilio de la viva unión del Pontífice con los obispos», dijo Baldisseri.
El domingo, 18 de octubre, a las 10:30 h., en la Basílica Vaticana, habrá una misa para la canonización de los esposos beatos Louis Martin y Marie-Zélie Guérin, padres de santa Teresita del Niño Jesús, y de la española madre María de la Purísima, sucesora de santa Ángela de la Cruz.
En la basílica de Santa María la Mayor de Roma, se invita al pueblo de Dios a acompañar con la oración los trabajos del Sínodo, invocando la protección de la Salus Populi Romani y del matrimonio de los beatos Martin, cuyas reliquias están expuestas en el templo. Todos los días a las 17, se rezará el Rosario y se celebrará misa a las 18. En la primera semana se rezará por los niños, en la segunda por los padres, en la tercera por los abuelos .
En las cercanías del Aula sinodal —concluyó el cardenal— se ha predispuesto, como de costumbre, una capilla para la oración de los participantes en el Sínodo, donde están expuestas las reliquias de santa Teresita del Niño Jesús, de sus padres y de los esposos Beltrame Quattrocchi.
VIS / Redacción