El Papa recuerda la figura de Don Peppe Diana, sacerdote asesinado por la Camorra italiana - Alfa y Omega

El Papa recuerda la figura de Don Peppe Diana, sacerdote asesinado por la Camorra italiana

En un mensaje al obispo de Aversa, el Santo Padre recuerda que su «herencia espiritual» sigue viva y anima a seguir su ejemplo «para ser artesanos de la paz» y defensores de la justicia

Ester Medina
El sacerdote Don Peppe Diana
El sacerdote Don Peppe Diana. Foto: Vatican News.

Este martes se conmemora el 30 aniversario desde que la camorra italiana asesinara al sacerdote Don Peppe Diana, más conocido como Don Peppino, a sangre fría en su parroquia de San Nicolás de Bari, en Casal di Principe (Nápoles). Aquel 19 de marzo de 1994, Diana se disponía a la celebración de la Eucaristía a primera hora de la mañana cuando un hombre entró a la sacristía, lo llamó por su nombre y, sacando un arma, disparó cuatro tiros. Dos en la cara y dos en el pecho.

El Papa Francisco se ha dirigido este martes al obispo de Aversa, Angelo Spinillo, evocando la valentía y el compromiso del sacerdote asesinado. En su mensaje se ha dirigido también a las nuevas generaciones: «No os dejéis robar la esperanza, cultivad ideales elevados y construid un futuro diferente con trabajos honestos», recoge Vatican News. Asimismo, ha recalcado el ejemplo de Don Peppe «para convertiros en artesanos de la paz» y en defensores de la justicia, de forma que «acariciemos una sociedad fecundada por la fraternidad y la comunión».

En las calles de Casal di Principe este martes ha tenido lugar una marcha impulsada por estudiantes conmemorando el trigésimo aniversario del asesinato de este sacerdote. En el evento han participado los scouts, a los que pertenecía Diana, y ha finalizado con la lectura de los nombres de las víctimas del crimen organizado. El diputado Marco Cerreto ha sido quien ha puesto el broche final a la marcha con estas palabras: «El recuerdo de don Peppe está vivo y es una advertencia para que se continúe en la lucha contra la violencia y la criminalidad. Es nuestro deber honrar la historia de un hombre justo que hizo de la legalidad su bandera de vida. Que Diana siga siendo ejemplo para nuestro territorio».

La «herencia espiritual» de Don Peppe Diana sigue viva alimentando innumerables obras buenas. Por esto, el Pontífice ha expresado su gratitud a aquellos que continúan su labor pastoral «perseverando en el camino trazado por Diana y que, con empeño cotidiano, cultiváis pacientemente la semilla de la justicia y el sueño del desarrollo humano y social», indica el medio vaticano.

Las razones del asesinato apuntan a la poca magnificencia con la que el cura celebró una Misa en honor del tío y el primo del asesino. Diana, que tenía 36 años cuando murió, era considerado un símbolo de la lucha contra la mafia napolitana y una semana antes había declarado ante los magistrados de Nápoles dedicados a investigar las relaciones de la Camorra con políticos y empresarios.