El Papa propone la oración de bendición frente a la barbarie terrorista y las guerras - Alfa y Omega

El Papa propone la oración de bendición frente a la barbarie terrorista y las guerras

Durante la audiencia, ha asegurado su oración por una Nigeria «aun ensangrentada» por el ataque terrorista del sábado

Redacción
Foto: AFP / Audu Marte

El Papa Francisco ha asegurado durante la audiencia general su «oración por Nigeria, aún ensangrentada» por «un ataque terrorista» cometido este sábado en el que «más de cien campesinos, que estaban trabajando, fueron brutalmente asesinados».

El Pontífice ha manifestado sus condolencias a los familiares y le ha pedido a Dios que los «conforte» y que «acoja» a las víctimas «en su paz». La matanza, que ha conmocionado al país africano, fue perpetrada por el grupo terrorista Boko Haram

Por último, el Santo Padre ha rogado al Señor para que «convierta el corazón de los que cometen tales horrores, que ofenden gravemente su nombre».

Misioneras asesinadas

Durante su saludo a los fieles de lengua italiana, Bergoglio también ha tenido un recuerdo de las cuatro misioneras norteamericanas asesinadas en El Salvador hace cuatro décadas: Maura Clarke, Ita Ford, Dorothy Kazel y Jean Donovan.

Han pasado ya 40 años de aquel 2 de diciembre de 1980, día en el que «fueron secuestradas, violadas y asesinadas por un grupo de paramilitares», ha recordado el Papa.

Las misioneras –tres religiosas y una voluntaria– «prestaban su servicio en El Salvador en el contexto de la guerra civil». En concreto, «con generosidad evangélica y corriendo graves peligros, llevaban comida y medicinas a los hambrientos y enfermos, ayudando a las familias más pobres».

Estas mujeres, ha concluido Francisco, «vivieron su fe con gran generosidad» y «son un ejemplo para todos para ser fieles discípulos misioneros».

Oración de bendición

Antes de este clamor por la paz, el Pontífice ha reflexionado durante la catequesis sobre la bendición, a la que se ha referido como «una dimensión esencial de la oración» y una huella indeleble de Dios a pesar de la capacidad del ser humano de «propagar el mal y la muerte en el mundo».

Nada «podrá borrar la primera huella de Dios, una huella de bondad que Dios ha puesto en el mundo, en la naturaleza humana, en todos nosotros: la capacidad de bendecir y el hecho de ser bendecido». De hecho, «la esperanza del mundo está completamente en la bendición de Dios». Y «si nos preocupáramos más por bendecir a los demás, seguramente no habría guerras» , ha subrayado el Santo Padre.

La bendición persiste incluso en los hijos que se han podido equivocar. Por eso es importante «hacer sentir a las personas que siguen bendecidas a pesar de sus graves errores» y «que el padre celestial sigue amándolas y esperando que finalmente se abran al bien».

Nadie es irrecuperable, ha concluido, «porque la gracia de Dios cambia la vida: nos toma como somos, pero nunca nos deja como estamos».

Reunión del C-7

Por otro lado, la Oficina de Prensa de la Santa Sede ha informado de que Francisco participó el martes por la tarde en una nueva reunión virtual del Consejo de Cardenales que lo asesoran en la reforma de la Curia. Se trataba de la primera reunión del grupo de trabajo después de la incorporación al mismo del cardenal Fridolin Ambongo Besungu, arzobispo de Kinshasa (República Democrática del Congo).

Él y el resto de participantes (Óscar Rodríguez Maradiaga desde Honduras, Reinhard Marx desde Alemania, Sean Patrick O’Malley desde Estados Unidos y Oswald Gracias desde la India, además de Pietro Parolin y Giuseppe Bertello desde el Vaticano) compartieron «aportaciones sobre la vida de la Iglesia en los distintos continentes, en particular en la actual situación sanitaria» y su evolución durante las últimas semanas. La anterior reunión del Consejo de Cardenales, primera desde el inicio de la crisis sanitaria global, tuvo lugar el 13 de octubre.

A continuación, el secretario del equipo, monseñor Marco Mellino, «resumió los pasos dados en la redacción del texto de la nueva constitución apostólica, mientras se están estudiando las observaciones, enmiendas y propuestas recibidas de los dicasterios consultados en los últimos meses». La siguiente reunión está prevista para febrero.