El Papa pide a los Neocatecumenales que evangelicen por todo el mundo «asumiendo riesgos»
Francisco celebra con mas de cien mil fieles del Camino Neocatecumenal el 50 aniversario de su llegada a Roma
En un emocionante encuentro con mas de cien mil personas del Camino Neocatecumenal, el Papa Francisco les ha invitado este sábado a evangelizar «asumiendo riesgos» por todo el mundo, sabiendo que «solo una Iglesia separada del poder y del dinero, libre de triunfalismos y clericalismos puede testimoniar de modo creíble que Cristo libera al hombre». Y a evangelizar en familia, como la Sagrada Familia de Nazaret.
La fiesta del 50 aniversario de la llegada a Roma –con predicación, oraciones, cantos y bailes– tuvo que ser celebrada en la gran explanada de Tor Vergata –donde permanece la Cruz del encuentro de la Jornada Mundial de la Juventud del año 2000–, embellecida con un artístico escenario. El total de participantes se acercaba a los 150.000, incluidos 19 cardenales y 90 obispos.
Francisco ha saludado con cariño a Kiko Argüello, Ascensión Romero y el sacerdote Mario Pezzi, componentes del equipo internacional que dirige la actividad del Camino. El Papa les había recibido el pasado 19 de abril, primer encuentro en que participó la maestra y misionera española en Rusia que ha tomado el relevo de Carmen Hernández.
El Santo Padre fue aplaudido por cada grupo nacional a medida que Kiko Argüello les mencionaba: desde los 60.000 italianos, 8.000 españoles y otros tantos polacos, a los 7.000 de Estados Unidos, incluyendo también grupos pequeños de países difíciles, como los 400 venidos de China o los 211 de Irak.
El iniciador del Camino fue presentando a un buen número de cardenales de la Curia vaticana –incluido Kevin Farrell, prefecto del Dicasterio para los Laicos, Familia y Vida del que dependen las organizaciones laicales–, y de los distintos países como los españoles, Carlos Osoro, arzobispo de Madrid, Ricardo Blázquez, arzobispo de Valladolid, y Antonio María Rouco Varela, emérito de la capital. El iniciador mencionó igualmente a otros trece obispos de ciudades españolas, que recibieron aplausos.
Una gran fotografía de Carmen Hernández joven –la misma que figura en la portada de sus «Diarios»– recordaba en el estrado a la co-iniciadora, fallecida en 2016 a los 85 años. Kiko pidió un aplauso «para Carmen, que está muy contenta en el cielo».
Atención a los marginados
Kiko y Carmen Hernández –doctora en Ciencias Químicas y en Teología– llegaron a Roma en 1968, a los cuatro años de la fundación del Camino, animados por el sacerdote italiano Dino Torreggiani, fundador de una congregación sacerdotal para atender a marginados, gitanos e inmigrantes, fallecido en Palencia en 1983, y actualmente en proceso de beatificación.
A su llegada a Roma fueron visitando parroquias para ofrecer catequesis, pero no lograron buena acogida y Kiko sintió la necesidad interior de irse a vivir de nuevo con los más pobres. Esta vez, en las chabolas del desaparecido Borghetto Latino, junto a la Vía Latina, al sur de la ciudad.
Al cabo de cuatro meses de esfuerzo, lograron crear la primera comunidad en la parroquia de los Mártires Canadienses en el barrio Nomentano. En la actualidad, hay 477 comunidades neocatecumenales en 104 parroquias de Roma.
En el año 2009, el Papa Benedicto XVI envió a las primeras familias romanas como misioneras a parroquias difíciles de arrabales de Roma como «comunidades en misión». En el encuentro celebrado en Tor Vergata, el Papa Francisco ha enviado otras comunidades a 25 parroquias periféricas de Roma, a petición de los respectivos párrocos.
El pasado 22 de abril, el Papa Francisco ordenó en la basílica de San Pedro a 16 nuevos sacerdotes de la diócesis de Roma, entre los que figuraban seis procedentes del seminario «Redemptoris Mater», el primero del Camino, establecido por san Juan Pablo II en 1986. En la actualidad hay 120 seminarios «Redemptoris Mater» en los cinco continentes con un total de 2.300 seminaristas, que seguirán los pasos de los 2.380 sacerdotes ordenados en estos 28 años.
Familias misioneras
Durante el multitudinario encuentro en Tor Vergata, el Papa ha enviado 34 grupos de cuatro o cinco familias como misioneros a países de evangelización. Cada missio ad gentes está formado por cuatro o cinco familias numerosas y un sacerdote.
Francisco llevaba enviadas ya 128 missio ad gentes. En estos momentos hay 1.668 familias misioneras organizadas en 134 misiones de este tipo en Europa, 46 en Asia, 18 en América, 9 en África, 8 en Oceanía y una en Oriente Medio.
Al entregar las cruces de las 34 misiones, el Papa les ha invitado a «amar las culturas y tradiciones de los pueblos, sin aplicar modelos preestablecidos. Será el Espíritu quien plasmará el anuncio según sus plazos y sus modos. Y la Iglesia crecerá a su imagen».
También ha recordado a todos que «caminar juntos es un arte hay que aprender siempre. Hay que estar atentos, por ejemplo, a no dictar el paso a los demás, sino más bien acompañarlos y ayudarles».
Al cabo de 54 años desde el comienzo en las chabolas de Palomeras, el Camino Neocatecumenal está extendido en 134 países, con un total de 21.300 comunidades en 6.270 parroquias. El número de personas que reciben ayuda espiritual del Camino se cuenta por millones.
Tan solo poquísimas personas podían imaginar todo esto en aquel verano de 1968, cuando dos jóvenes idealistas llegaron de España con una pequeña semilla que parecía no interesar a casi nadie.
Juan Vicente Boo / ABC