El Papa nombra un administrador para Rumbek (Sudán del Sur) tras el atentado contra su obispo

Matthey Remijio Adam Gbitiku ha sido nombrado administrador apostólico de la diócesis de Rumbek, en Sudán del Sur, tras el atentado contra su obispo electo. Según recoge la página web de la Asociación de Conferencias Episcopales del Este de África (AMECEA), se trata de un encargo temporal. Solo hasta que Christian Carlassare, el obispo electo, «se cure, sea ordenado y tome posesión» de la diócesis, «esperemos que lo antes posible», ha declarado Mark Kadima, encargado de negocios de la nunciatura apostólica en el país.

Carlassare aún se recupera en Nairobi (Kenia) de las heridas sufridas en ambas piernas el 26 de abril. En medio de la noche, unos desconocidos irrumpieron en la residencia sacerdotal donde vivía y le dispararon. Había llegado a la diócesis apenas diez días antes, después de que su nombramiento se hiciera público en marzo. Gbitiku, comboniano como él, es desde noviembre obispo de la diócesis de Wau.

41 detenidos

La Policía del país sigue investigando el ataque. De momento, la principal hipótesis es que detrás del mismo hubo un conflicto de poder en el seno de la diócesis de Rumbek, agravado por las divisiones étnicas. A ello parece apuntar el hecho de que entre los 41 detenidos hasta el momento se encuentra quien durante diez años fue coordinador de la diócesis, el padre Mathiang Machol. También un sobrino suyo, varios sacerdotes y trabajadores de la diócesis, y algunos policías, según la emisora Eye Radio.

Este medio informó a última hora del viernes de que los agentes tienen bajo custodia desde el martes al que consideran el principal sospechoso y autor material del ataque. «Está siendo interrogado y estamos seguros de que delatará a los otros autores y al equipo» que organizó el ataque, ha afirmado el coronel James Dak Karlo.

La raíz de la guerra civil

Mathiang Machol, sacerdote local, había estado al frente de la diócesis de Rumbek desde 2011, cuando su obispo, Cesare Mazzolari, falleció repentinamente durante una Misa el 16 de julio. Sudán del Sur había logrado la independencia solo una semana antes. Se sospecha que el nombramiento de Carlassare como obispo suscitó rechazo en la Iglesia local, pues se esperaba que Machol fuera el nuevo pastor tras tantos años al frente de la misma.

El hecho de que hasta entonces Carlassare hubiera trabajado en Malakal, zona donde es mayoritaria la etnia nuer, tampoco le ayudó a ser bien recibido en una zona dinka, la etnia mayoritaria del país. La rivalidad entre los dinka y los nuer ha sido uno de los factores clave en la guerra civil que comenzó en 2013 en el país y que todavía no se ha resuelto de forma definitiva.

En este contexto, el arzobispo de Juba, Stephen Ameyu Martin Mulla, ha hecho un llamamiento por la paz y la reconciliación. «Arraiguémonos en Cristo, no solo alzándonos contra el miedo y la violencia, sino avanzando hacia una unidad renovada en la que seamos uno con Él y unos con otros».