El Papa no visitará España «hasta que no termine con los países pequeños» de Europa

Antes de viajar a Lisboa, el Papa Francisco ha concedido una entrevista a los compañeros de Vida Nueva con motivo del 65 aniversario de su publicación. El Pontífice confiesa que es «una víctima del Espíritu Santo» rememorando los días del cónclave y las congregaciones generales. Asegura que una serie de cardenales le fueron haciendo comentarios sobre su posible elección durante los días previos a las votaciones, pero que él no estaba nervioso en absoluto. «Uno, en el fondo, es víctima de la Providencia, del Espíritu Santo. Así entré yo al cónclave y así salí. En la primera votación de la tarde, cuando ya era casi evidente todo, se me acercó el cardenal Hummes, que estaba detrás mío, y me dijo: No te preocupes, así trabaja el Espíritu Santo. Y, cuando ya salí elegido en la votación definitiva, fue cuando me comentó eso que ya he dicho tantas veces: No te olvides de los pobres. Conclusión: comparto esto para que vean que el Espíritu Santo existe y yo creo que me puso Él».

Transexuales, hijas de Dios

Dice Francisco que la Iglesia no está preparada para un Concilio Vaticano III porque aún no se ha aplicado ni el II a la pregunta de que si, dados los temas que está tratando el Sínodo de la sinodalidad, no era mejor darle forma de Sínodo. También habla de la rigidez espiritual y de la existencia de muchos sacerdotes jóvenes que son especialmente rígidos: «Hay gente que vive atrapada en un manual de teología, incapaz de meterse en los problemas y hacer que la teología vaya adelante. La teología estancada me hace recordar eso de que el agua estancada es la primera que se corrompe, y la teología estancada crea corrupción».

También han sorprendido, al menos en Italia, las afirmaciones del Papa sobre las personas transexuales. Varios medios han titulado con esa frase de Francisco en la que dice que «son hijas de Dios». El Pontífice lamenta que «algunos me echen en cara que recibo en la audiencia general de los miércoles a transexuales». «Vienen de la mano de sor Geneviève Jeanningros, una monja francesa entregada a la pastoral circense. La primera vez que vinieron y me vieron, salieron llorando, diciendo que les había dado la mano, un beso… Como si hubiera hecho algo excepcional con ellas. ¡Pero si son hijas de Dios! Él te sigue queriendo así, como sos. Jesús nos enseña a no poner límites», recuerda.

Obispos españoles

Y el Papa habla de España. Por un lado sobre la visita de los dos obispos españoles a los seminarios patrios. Francisco no quiere pronunciarse en concreto sobre los seminarios españoles, pero indica que los seminarios con pocos seminaristas ya no son viables Hay que redimensionar y generar una dinámica comunitaria sensata, y destaca que los seminarios han de formar pastores, no ideólogos: «Los seminarios no pueden ser cocinas ideológicas». El Papa asegura que los obispos españoles son buenos pastores y explica cuál es el criterio que está siguiendo para los nuevos nombramientos: «Una vez que un obispo es residencial y está destinado, ya está casado con esa diócesis. Si mira otra, es adulterio episcopal. Quien busca un ascenso, comete “adulterio episcopal”. Por eso, estoy pidiendo que busquen sacerdotes u obispos auxiliares».

Nicaragua, Ucrania y próximos viajes

Y precisamente sobre nuestro país, el Papa dice que no va a ir a los países grandes del continente hasta que no termine con los pequeños. El próximo país pequeño que visite el Pontífice podría ser Kosovo, cuya independencia, paradójicamente, no reconoce todavía la Santa Sede. Francisco dice que el viaje a Argentina ya está en programa y quizá incluya Uruguay. Y sin dejar su continente natal, confirma que pidió a Lula da Silva que intercediera con Daniel Ortega para liberar al obispo Rolando Álvarez. Explica el Pontífice que la Santa Sede sigue negociando con Nicaragua.

Volviendo a Europa no se olvida de Ucrania. Asegura que estudia la posibilidad de designar a un representante permanente que pueda «servir de puente» entre Rusia y Ucrania y confirma que Matteo Zuppi viajará a Pekín tras sus visitas a Kiev, Moscú y Washington. Y revela que «además, para noviembre, antes de que se celebre la Cumbre del Clima de Naciones Unidas en Dubai, estamos organizando un encuentro por la paz con los dirigentes religiosos en Abu Dabi».