El Papa no descarta viajar a Ucrania
Así lo ha revelado a los periodistas a bordo del avión papal con destino a Malta
Pocos minutos antes de las diez de la mañana, el avión del Papa ha aterrizado, según lo previsto, en el aeropuerto de Internacional de Malta. La mañana de Francisco había comenzado horas antes, en Casa Santa Marta. Como hace en algunos de sus viajes, antes de partir, ha recibido a un grupo de personas especial. En este caso, eran familias refugiadas ucranianas acogidas por la Comunidad de San’t Egidio y acompañadas por la Limosnería apostólica. Una de las familias estaba formada por una madre de 37 años con dos niñas, de 5 y 7 años. Llegó a Italia desde Leópolis hace unos 20 días. La niña pequeña fue sometida inmediatamente a una intervención en el corazón y sigue tratamiento en Roma. Al encuentro también asistieron dos madres de Ternópil que son cuñadas. Entre las dos suman 4 hijos de entre 10 y 17 años y están viviendo en un piso donado por una mujer italiana. También llegaron hace poco más de 20 días a Italia. Los niños ya acuden al colegio en Roma. La última de las familias llegó a la Ciudad Eterna hace tan solo tres días. Anteriormente habían recalado en Polonia. Son un padre y una madre con tres hijos de 16, 10 y 8 años y la abuela de 75. La familia al completo también goza de la generosidad de una señora italiana que ha cedido un piso para acoger refugiados. Pese a que rige la ley marcial en Ucrania y los varones deben permanecer en el país, aquellos padres de familia con 3 o más hijos menores a su cargo, pueden abandonar Ucrania para acompañarlos. El Papa ha estado cercano con todas estas familias a las que ha demostrado su afecto y atención y el interés del Vaticano por que Rusia ponga fin a la invasión de Ucrania.
Tras el encuentro, Francisco se ha dirigido al romano aeropuerto de Fiumicino desde el que ha partido rumbo a Malta. De acuerdo con la tradición, y cuando ya el vuelo había superado la fase de despegue, se ha acercado a los periodistas que lo acompañan en este su trigésimo sexto viaje apostólico. La corresponsal de la cadena COPE, Eva Fernández, ha obsequiado al Santo Padre con una impactante pintura realizada por Daniel, un joven nigeriano que a punto estuvo de morir ahogado intentando alcanzar las costas europeas. El muchacho vio cómo sus amigos perecían en el intento y, como si de una fotografía se tratara, ha inmortalizado el dramático momento en un lienzo que la periodista ha entregado a Francisco. El Papa, al verlo y escuchar la explicación de Eva ha respondido: «¡Cuánto dolor!» En la parte de atrás de la pintura, su autor, Daniel, escribe: «Ese día perdí una parte de mi alma. Por más que tendí mis manos, no pude salvar a mis hermanos de la muerte». Francisco conocerá a Daniel y a Kibrom, otro joven que también le ha enviado una pintura que refleja su dramática travesía hasta Malta, durante su visita de este domingo al John XXIII Peace Lab, un centro que acoge y desarrolla proyectos desde hace 30 años con migrantes y refugiados y que fue fundado por un franciscano, el hermano Dionysius Mintoff.
En otro de sus saludos a los comunicadores que viajan con él, el Pontífice ha revelado que la posibilidad de viajar a Ucrania sigue sobre la mesa. Francisco sigue considerando visitar Kiev, tal y como le había solicitado el presidente ucraniano, Volodomir Zelenski, en una de las conversaciones que han mantenido durante estos días.