El Papa: «En la comunión, Jesús nos da como medicina su preciosa sangre»

Durante la audiencia general de este miércoles, celebrada al inicio de la primavera europea, el Papa preguntó si una planta florece bien en primavera si le han quitado o no tiene raíces. «No», respondieron los fieles congregados en la plaza de San Pedro. «La vida cristiana es una vida que debe florecer en las obras de caridad, pero si no tienes raíces no puedes florecer. Y “¿quién es la raíz?” ¡Jesús! Si en tu raíz no está Jesús, no florecerás».

Tras la florida introducción, Francisco continuó con su ciclo de catequesis sobre la Misa. Este miércoles 21 de marzo se detuvo especialmente a considerar la comunión, en la que «Jesús se nos sigue dando en su cuerpo y en su sangre, por el ministerio de la Iglesia, como hizo con los discípulos en la última cena».

Durante la catequesis, el Santo Padre subrayó la «bondad» de Dios «al darnos como medicina su preciosa sangre, derramada para el perdón de los pecados». En este sentido, recordó que Jesús «no se cansa de perdonar», sino que «somos nosotros que nos cansamos de pedir perdón».

La Eucaristía, continuó Bergoglio, «nos hace fuertes para dar frutos, flores de buenas obras para vivir como cristianos». Por ello, invitó a los fieles a acercarse a la Eucaristía, «que nos transforma en Jesús y nos hace más fuertes».

En este punto, Francisco recordó que, «según la praxis eclesial, el fiel se acerca en procesión y recibe la Eucaristía en pie con devoción o de rodillas recibiendo así el sacramento en la boca o, donde se permite, en la mano, como prefieran».

Viaje a Dublín

Al final de la audiencia, durante su saludo a los peregrinos irlandeses, el Pontífice confirmó que viajará a Dublín (Irlanda) entre el 25 y el 26 de agosto de 2018 para asistir al Encuentro Mundial de las Familias.

El encuentro, que se realiza cada tres años para celebrar, rezar y reflexionar sobre el matrimonio y la familia, se celebrará del 21 al 26 de agosto bajo el lema El Evangelio de la Familia: Alegría para el Mundo.

Las catequesis del evento girarán en torno «a la Amoris Laetitia» y «a la página evangélica de la pérdida de Jesús en el templo», explicó recientemente el prefecto del Dicasterio para los Laicos, Familia y Vida, el cardenal Kevin Farrel, y desvelarán «cómo de actual y profético es el anuncio del Evangelio de la familia».

Las catequesis comenzarán con una «mirada concreta» a las familias de hoy y a «la actualidad de la Palabra de Dios», capaz de derribar los muros domésticos. Después se pondrá el foco en «el gran sueño que Dios tiene por cada familia, también allí donde la fragilidad y las debilidades parecen infringirla».